La Guardia Estatal llevó a cabo un operativo en diversos sectores de Reynosa que derivó en el retiro de 16 cámaras de videovigilancia instaladas de forma ilegal. De acuerdo con la Secretaría de Seguridad Pública de Tamaulipas, estos equipos eran presuntamente utilizados por criminales para monitorear los movimientos de las autoridades y de la población.
¿Quiénes realizaron el operativo?
El despliegue fue encabezado por elementos de la Guardia Estatal, quienes recorrieron distintas zonas estratégicas del municipio. La acción formó parte de los trabajos de seguridad y vigilancia permanente que realiza la corporación en coordinación con otras dependencias estatales.
Los agentes realizaron inspecciones en puntos considerados de alta incidencia delictiva y en áreas con estructuras elevadas, donde suelen colocarse dispositivos de monitoreo clandestinos.
¿Qué fue lo que retiraron?
Durante las labores, el personal logró ubicar y retirar un total de 16 cámaras ilegales que se encontraban escondidas en lugares estratégicos. Los dispositivos estaban instalados en espectaculares, antenas y torres de comunicación, con vistas hacia vialidades importantes como el Boulevard Morelos, Álvaro Obregón, Lázaro Cárdenas y el Libramiento Monterrey, entre otros puntos.
La ubicación y el tipo de estructura sugieren que las cámaras eran parte de una red de observación que permitía a los grupos delictivos vigilar las rutas utilizadas por las fuerzas de seguridad o detectar sus movimientos con anticipación.
¿Qué otros artículos se encontraron?
Junto con los equipos de videovigilancia, los agentes también aseguraron nueve paneles solares que mantenían en funcionamiento los sistemas de forma autónoma. Esto indicaría que los aparatos estaban diseñados para operar sin depender de conexiones eléctricas visibles, dificultando así su detección.
El material incautado fue retirado cuidadosamente para evitar riesgos eléctricos o daños estructurales en los puntos donde se encontraba anclado.
¿Qué sigue después del retiro de estos objetos?
Tras el aseguramiento, todo el equipo decomisado fue entregado a la Fiscalía General de Justicia del Estado de Tamaulipas (FGJT), autoridad encargada de continuar con las investigaciones. Se espera que a través de los análisis técnicos se pueda determinar quiénes colocaron las cámaras, cuándo fueron instaladas y si estaban conectadas en red para transmitir imágenes en tiempo real.
El operativo forma parte de una estrategia más amplia que busca desarticular los sistemas de inteligencia utilizados por grupos delictivos en Tamaulipas, con el obje
tivo de recuperar el control y la tranquilidad en zonas urbanas.