El 2026 es vislumbrado por muchos actores políticos en Tamaulipas como la punta de lanza hacia su proyecto personal. Diputados federales, legisladores del Congreso del Estado, y por supuesto, los alcaldes, intensificarán su agenda hacia la próxima elección intermedia programada para junio del 2027.
En la mayoría se augura la tentativa de continuidad. Todavía con la vigencia de una reelección para servidores públicos contemplado en la Ley Electoral, la última ocasión en aplicarse en el país, lo acontecido en los recientes meses es tomado como un “aprendizaje” para enfocarse en acciones más concretas a la ciudadanía.
De los ayuntamientos más importantes, tres están en posibilidades de una potencial reelección: Tampico gobernado por Mónica Villarreal, Ciudad Madero bajo la administración de Erasmo González Robledo y Matamoros a cargo de Beto Granados.
Cabe señalar que llegaron a esta encomienda a través de una coalición que encabezó el Movimiento de Regeneración Nacional. Los otros de mayor población están obligados a una renovación.
Aquí es donde surge la duda: ¿Cuál será el futuro de esos alcaldes salientes?
Vamos primero a la frontera. Carmen Lilia Canturosas suena con fuerza como una de las opciones dentro de la 4T para la gubernatura. La edil de Nuevo Laredo enfocará sus baterías sabiendo que hay cartas como las senadoras Olga Sosa y Maki Ortiz. Entregar su puesto en vísperas de dicho proceso por el Ejecutivo estatal, le da margen de maniobra.
La duda en Reynosa es el papel que querrá jugar Carlos Peña. En octubre del 2027 termina su segundo y último periodo, sin descartar el deseo de una diputación federal.
Dicha curul en San Lázaro empieza a ser muy analizada por otro jefe edilicio tamaulipeco, Armando Martínez Manríquez de Altamira, ciudad que pertenece al Distrito 07 federal. Muchas voces en la urbe industrial apuntan hacia esa dirección.
Para cerrar, el polémico Lalo Gattás se engalla y habla de pelear por la grande, bajo el argumento de ser el presidente municipal de la capital, Ciudad Victoria. Tiene más dificultades aunadas a la mala imagen acarreada por su gestión, desde la poca simpatía con el actual sistema gubernamental, hasta la decisión final que vendrá desde Palacio Nacional.
Dejamos este escrito como una referencia. Nos leeremos en un año y ya sabremos si todo lo comentado en torno a estos alcaldes se cumple o cambian de opinión.
