Unos años atrás en una visita al Banxu, comunidad de Ixmiquilpan, surgió la inquietud de realizar un proyecto para la utilización de manzanas y peras que se producen en la región y que no son utilizadas. Derivado del desperdicio de frutas, se buscó la forma de usar al Sol como instrumento para deshidratar diferentes perecederos que se producen en el Valle del Mezquital. Aunque el Sol se utiliza ya en muchos hogares para calentamiento de agua, aún en los procesos alimenticios, solo se usa secado al Sol directamente.
En aras de compartir la visión obtenida en un diplomado de Difusión y Divulgación de la Ciencia yla Tecnología, le traemos a usted, estimado lector, este trabajo sobre el secado solar, de parte de la comunidad de la Universidad Tecnológica del Valle del Mezquital (UTVM) deseamos le sea de utilidad.
Desde tiempos inmemoriales, para el Valle de la Muerte (Valle del Mezquital), el secado al Sol ha constituido un método de conservación para chiles y algunos granos, mas el uso de deshidratadores solares es casi desconocido en la región, ignorándose que, además de lograr una mejor calidad en sabor y apariencia de los productos, se obtienen ventajas como:
Un proceso de deshidratado en menor tiempo, entre dos a tres días menos.
En tiempos de lluvia no se necesita recoger el producto.
Evita la infestación de insectos, la contaminación y pérdida por los excrementos de pájaros y ratas en los productos deshidratados.
Conserva las propiedades nutritivas, bromatológicas y organolépticas de los productos orgánicos.
El crecimiento poblacional y la economía de mercado han aumentado la demanda de productos y energía. La utilización de deshidratadores solares que permitan el consumo y utilización de los recursos naturales de la región, con bajo costo y máximo de utilidades, es hoy por hoy una alternativa para el desarrollo de comunidades marginadas y de escasos recursos.
En el Valle del Mezquital se pierden perecederos como higos, manzanas, peras, duraznos, chiles, orégano, etcétera, por la falta de conocimiento en sus procesos de conserva, así como por la carencia de elementos científicos y tecnológicos (como mapas de disponibilidad energética solar, sistemas de deshidratación solares, estudios de materiales de alta absorbancia, etcétera) y por los escasos recursos económicos de los pobladores.
La energía solar es un recurso renovable, gratuito y con elevado índice de incidencia en el centro de México, por ejemplo, en Ixmiquilpan representa alrededor de 320 días soleados al año, con entre 4 y 5 horas de incidencia solar con energía que se puede equiparar a 11 focos de 100 watts por metro cuadrado, por lo que puede ser utilizada sin duda para el aprovechamiento de frutas y verduras que se producen en la zona, deshidratándolas para su comercialización y posterior consumo, beneficiando a los productores de la región.
Cuando deshidratamos se busca un secado correcto, los factores claves para ello son: 1) aire caliente a una temperatura de 40 a 70ºC. 2) aire con un bajo contenido de humedad. 3) movimiento constante del aire. Al calentar aire, que está a temperatura ambiente aumenta su capacidad de absorber vapor de agua. Por cada 20ºC de aumento de la temperatura del aire, su capacidad de retener vapor de agua se triplica y por consecuencia su humedad relativa se reduce a un tercio, logrando con esto un deshidratado en frutas que contribuye a la conservación de los alimentos para su consumo.
Román Bravo Cadena
PTC del PE de Mecánica