En los productos de entretenimiento; ya sean series de televisión, cómics, películas, videojuegos, es difícil hablar de una renovación total de la premisa central e incluso del personaje principal de la historia; pasó alguna vez en los Expedientes Secretos X; en el 30 aniversario de la muerte de Superman, vale la pena mencionar cuando se reemplazó al Hombre de Acero por diferentes personas en la saga “El Reino de los Súperhombres”; cuando Bruce Wayne “murió” y dejó el manto de Batman en los hombros de Dick Grayson (Nightwing y el primer Robin); Wally West, tomando el traje escarlata para reemplazar a Barry Allen como Flash, entre muchos otros ejemplos dentro de las viñetas, pero todo en el mundo requiere renovaciones, incluso en la política.
Nuevamente la tinta política invade este espacio querido lector y lectora, por ello le adelantó una disculpa si espera leer otra cosa; sin embargo, como es costumbre se hará digerible este texto para entender que las renovaciones siempre son un reto para el producto, ya sea una producción de entretenimiento, así como un partido político; pero lo es igual para la persona que llega a ocupar el lugar del perfil anterior, como fue para Dick Grayson ser el nuevo Batman; aunque reconozco que es burda la comparación, ningún político podría ser comparado con algún héroe o superhéroe ficticio, pues en el universo imaginario sí se reconoce cuando no se cumplen las expectativas o dejan el lugar al mejor perfil para el trabajo, por eso Bruce Wayne regresó para tomar el manto, mientras que Nightwing resurgió para hacer su labor independiente; en la realidad muchas veces no es así.
Continuar con una ideología, objetivo, meta, misión, o como se le quiera llamar en la realidad o la ficción, es un tema complicado; cuando en el universo de DC Comics murió Superman, Clark Kent, de una Tierra; un Superman de un universo alterno o una Tierra gemela, por decirlo así, tomó su lugar; idéntico en todo aspecto al anterior, pero aún así generó reservas dentro de la Liga de la Justicia, Batman, como es su costumbre, fue el primero en cuestionarlo; “será idéntico, pero no es nuestro Superman… el no es mi amigo…”, sentenció. Podría sonar imposible, si este personaje comparte todo lo que abanderaba y representaba el anterior, luce igual y tiene las mismas habilidades; pero, si alguna cuestión difiere cuál es el riesgo… puede ser para mejorar, puede ser que no… nuestro cómic en la realidad se llama Morena y el libreto “La Cuarta Transformación”…
Este 27 de agosto, al menos en Hidalgo, 70 integrantes el Consejo General elegirán a una persona para llegar a la presidencia de éste, así como a siete integrantes del Comité Ejecutivo Estatal, sus órganos de dirección; por un lado se propone a una mujer joven para el primero de ellos; para el segundo un hombre que recorrió organizaciones campesinas y el Partido de la Revolución Democrática (PRD) una especie de raíz donde emergió el partido guinda; la pregunta es si podrán abanderar y alcanzar los objetivos del movimiento, pues siempre hay dudas; es como si de pronto le dieran la dirección de la Bati-familia a Batichica, aunque Bárbara Gordon tuviera la capacidad, los cuestionamientos no faltarían; mientras que por otro lado descartarías a los miembros fundadores de la Liga de la Justicia para decidir su futuro y le darías su timón a un perfil como Booster Gold, un héroe del futuro que viajó en el tiempo para tener gloria, pues en su época no era reconocido; de nuevo lector y lectora, es sólo un imaginario, la realidad es más cruda.
La decisión recae al final en los grupos de poder, esto curiosamente se comparte en la realidad y en la ficción; para la ficción hay escritores y expertos en marketing, quienes normalmente escuchan, o tratan, la voz de los fanáticos para darle lo que desean; en la realidad, muchas veces un partido político no escucha a su militancia, a veces ni lo intentan, y esto genera las condiciones adecuadas para un cisma; así se separaron muchos grupos de héroes en muchos universos, pero el peso de los grupos de poder, o políticos, es distinto y obedece a intereses personales, en muchos casos, y en el caso de Morena no es la excepción, así que el cuestionamiento persiste, ¿se podrá cumplir la meta inicial con nuevos protagonistas?
En Hidalgo se vive un escenario especial, por primera ocasión gobernará un partido distinto al tradicional (Partido Revolucionario Institucional), llega Morena con su libreto “La Cuarta Transformación”, los actores están definidos, aunque falta ratificarlos; pero sin duda el reto es grande, no sólo se requiere de un buen argumento para que el comic tenga éxito, cada persona debe hacer su trabajo, el equipo debe ser fuerte y sobre todo cada uno debe cumplir con el rol asignado, un eslabón débil en la cadena siempre es fatal, por ello cobra cierta importancia la renovación de dirigencias del partido guinda; sobre todo ahora que los reflectores están sobre él, tienen poder y presencia, pero la duda está presente, ¿podrán mantenerse?, el tiempo, siendo el más sabio, será quien sentencie al final.
Teodoro Santos