El regreso goleador de André-Pierre Gignac puede significar el peligro de que los Tigres dirigidos por Ricardo Ferretti entren a la Liguilla con tal fuerza que los convierta nuevamente en favoritos.
El francés se ha reencontrado con su mejor desempeño goleador de la mano de una actitud concentrada y disciplinada. En silencio, trabajando sin tanto protagonismo gratuito es que este extraordinario futbolista se convierte en único y temible.
¿Tienen un Gignac el Cruz Azul, el América, el Santos o los Pumas? Evidentemente no. Así que bien pudiera ser este goleador el factor que desequilibre o desempate la igualdad de fuerzas.
Con 26 puntos y una diferencia a favor de 13 goles, los universitarios están más que metidos en la Liguilla. Ocupan ahora el sitio sexto y si el torneo terminara ahora irían contra los Pumas en la primera ronda de la fase final. Cerrarán el torneo contra las Chivas, de visitantes, en un estadio que no es precisamente una fortaleza imbatible.
Así que cuando menos un puntito más harán y pase lo que pase no serán identificados como los favoritos, pero sí, con Gignac en tal estado de forma como la principal amenaza para los otros siete.
Gignac no se inventa. En qué buen momento aparece para reforzar a su club.
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