No importa que la iniciativa de mejorar la percepción salarial y otros derechos laborales de las mujeres deportistas venga de fuera. La Federación Mexicana de Futbol y en particular la Liga Mx deben hacer propias las reivindicaciones de género que desde el Senado de la República empiezan a tornarse en una iniciativa seria para reformar la Ley Federal del Trabajo.
Estos cambios están dirigidos a todas las deportistas profesionales, las que cobran un dinero por ejercer o dedicarse a esa actividad lucrativa. Pero es el futbol en el que mejor se plasma esto, pues la Liga Mx Femenil es de las pocas competiciones que han adquirido un estatus que hoy se antoja irreversible.
Creo que en las siguientes horas desde la Liga Mx Femenil debería de girarse un posicionamiento más formal y profundo al respecto. Pero en tono propositivo y entusiasta. Es hora de que todos los empresarios que han dado vida a la Liga Femenil hagan una mayor apuesta. Me refiero a los propietarios de los equipos, a las empresas patrocinadoras, a las televisoras con el pago de derechos y en una de esas también al público, que bien puede comprometerse a mejorar el pago que hoy hacen para acceder a las tribunas de los estadios donde se juegan sus partidos.
Habrá que hacer una revisión minuciosa a Ligas profesionales o semi profesionales en deportes como el basquetbol, voleibol… Las tenistas, las boxeadoras, las practicantes de la lucha libre o de las artes marciales mixtas.
Hasta ahora me gustó la reacción de la Liga Mx Femenil, que en voz de su muy activa presidenta, Mariana Gutiérrez, recibió con entusiasmo y alegría el trabajo de las y los senadores involucrados en el desarrollo y concreción de esta iniciativa.
Es casi un hecho que en el 2024 nuestro país elegirá a una mujer como Presidenta de la República. Motivación extra, nadie lo debe dudar, para que demos los pasos que se tengan que dar al frente para concretar una real igualdad en todo.