Por el lado de Durango, la fuerte sequía que se ha presentado en la entidad ha provocado la muerte de muchas cabezas de ganado, pero además, la población más vulnerable apenas tiene agua para lo más necesario, por lo que como cada año, están esperanzados a que llueva y lo poco que sembraron pueda dar frutos.
Claro que hay otros que ni se preocupan ni se acongojan, ya que cuentan con norias y sistemas de riego para sus cultivos principalmente de forrajes que sirven de alimento para las vacas.
Las familias que tienen sus ranchitos y con unas cuantas cabezas de ganado, esperan que sus agostaderos en estos meses de junio y julio puedan llenarse, esperando que la temporada de lluvias sea puntual y puedan lograr salvar a sus vacas, muchas de las cuales han muerto.
En la zona metropolitana, solamente se puede ver pasar el agua por los canales de riego y es que en muchos sectores, de la periferia principalmente, el vital líquido no llega a los hogares.
En Coahuila también han municipios en los que la falta de agua se está convirtiendo en un grave problema, ya que las precipitaciones han sido muy escasas y solamente se han presentado en forma esporádica en el norte del estado.
En La Laguna, tanto de Durango como de Coahuila, por más que se revisa el pronóstico del tiempo, simplemente no se ve para cuando pueda llover, mientras que en otros estados, las lluvias ya se han dejado sentir.
La pregunta es y para cuándo Agua Saludable para La Laguna acabará con el problema de la falta del vital líquido y es que el tiempo sigue pasando y los sistemas operadores nomás no dan una, ya que no han podido arreglar sus tuberías, no las han podido cambiar, ya que son obsoletas.
No cabe duda que el campo vive momentos difíciles, que el ganado está pagando las consecuencias ante la falta de agua y en los municipios, el fuerte calor ha provocado que el consumo del vital líquido aumente, por lo que es cuando se presentan los problemas en diferentes sectores y baja la presión para surtir los hogares y es cuando llega la desesperación de muchas familias, quienes para exigir que les lleguen unas cuantas gotas a sus viviendas, salen a bloquear desde calles, calzadas, avenidas y bulevares.
Walter.juarez@milenio.com