Hay quien se clava en las tropelías artificiales de la Casa de los famosos, cuyos debates se ven casi tan montados como los montajes de Loret #LordMontajes. Lo siento por quienes se conforman con esos numerazos que con trabajos infunden morbo y algo de entusiasmo. Si no fuera por los aludes de xochibots, los espectadores se aburrirían como cualquier panista frente a las arengas guangas de Marktititito Cortés, que es más aburrido que Alititito Moreno defendiendo la democracia. Si realmente quieren divertirse, amigos, amigas, amigues, amiguis, ámix todos, vean las mesas de debate de Latinus que están al nivel de los Paleros Alazraki y que hacen ver al Saco de Pus como un genio. Un espectáculo donde lo irracional es lo más racional y los delirios son más cotorros que ninguno.
Esos de Ladillus sí saben cómo hacerla. Ahí tenemos a mi Tatankita Córdova, the King of Democracy, pero bajo los estertores del Yoyo sin fin, tanto que junto a él Georgie Boy Castañeda parece víctima de baja autoestima. Lo mejor son los personajes todopoderosos de la cultura que, despeinados y con la mirada desgobernada, alegan que la gente es imbécil y por eso no acepta sus acertados diagnósticos sobre la proximidad de una Dictadura Macuspánica Lo que sí me sorprendió, pues lo suyo no es la autocrítica ni la introspección (por eso apoya a los Mexigringos contra la corrupción), fue que la dotora Dresser se atrevió a cuestionar el papel de los intelecuáles derechosos que, mientras elucubraban sobre las miserias del comunismo, se les olvidó reconocer los logros sociales de la Cuarta transformeichon. Un poco tarde. Está como quienes ante las inundaciones en Chalco, y después de echarle la culpa a AMLO que todo lo destruye, casualmente olvidaron que el creador de Chalco fue el héroe de la fanaticada neoliberal, Charly Salinas de Gortari.
Cómo estará la cosa que, junto a los panelistas de Latinus que representan el pensamiento a lo Javier Milei, hasta Pedro Ferriz que ve algoritmos comunistas por aquí, algoritmos comunistas por allá (dice que Xóchitl ganó las elecciones, las olimpiadas, Wimbledon y la presidencia de Venezuela), es una fuente inagotable de lógica, empatía y sentido común.
Supongo que, después del texto donde compara a AMLO con Díaz Ordaz, Echeverría, López Porpillo, Salinas, Fox, Calderón y Peña, que parece inspirado en el subjefe Diego, el subcomanche Marcos será invitado estrella de Latinus. Durito estaría orgulloso.
