Absolutamente maravillado por las argumentaciones de la dotora Denise Dresser para demandar a AMLO, en su calidad de catadora de desfiguros, siendo como es una profesional en la materia, frente a la que palidecen Kinky Téllez, el ChikiliQuadri y Sandra Baticuevas. Sobre todo cuando afirma con el mismo aplomo al que recurrió para sostener, junto con Aguayo, Bartra y Crespo, que la dictadura macuspánica es pior que la de Díaz Ordaz, pues ella es víctima de algo que supera cualquier fantasía animada de ayer y hoy: el “asesinato verbal”. Que se me hace que la asesoró la Paca. A ver si no demanda a López-Dóriga por decir que le gustó el AIFA.
Como quiere acabar con los desfiguros, seguro demandará a Markititito Cortés, Jelipillo y el mini Jelipillo por tomar en serio una declaración estrambótica del ex Fiscal de Donald Trump, al que le hace falta un grado para ser del Ku Klux Klan, el nada talentoso Mr. Barr que es rápido y furioso. Y no se diga mi Tatankita Lorenzo Córdova y Murayamasamí que con Edmundo Jacobo han hecho de los fideicomisos terciopelo, mientras alegan que prácticamente viven en la austeridad republicana. Chale.
Esperando que doña Denisse también demandara a Keith Raniere y Emiliano Salinas por administrar sectas satánicas, me topé con Juan Zepeda, un ya muy olvidado político perredista-eruvielista que se pasó a la corte de diablitos del infierno de Dante Delgado. Así, antes de saber bien a bien que era el candidato de Movimiento Ciudadano Edomex, se bajó de la contienda con un planteamiento muy dresseriano que –curioso— no refiere con las encuestas que lo traían más en picada que la reputación de Zambranititito: que había un acuerdo entre Morena y el PRIAN para repartirse los predios del grupo Atracomucho y la Coahuila de los Moreira de la moreiriña. Casi ni se oye jalado de los pelos, no se rían. Y luego mi Juan alegó que no iba a competir pues si ganaba lo iban a criticar y se ponía en peligro el plan de MC para el 2024, que debe estar diseñado para no hacer tanto el ridículo.
Que se me hace que se metió de la regañona como Vicente Fox, pues Zepeda presentó su numerazo con un look Alito Moreno. Y qué decir de la candidata del PRIAN, Alejandra del Moral, que le pide sororidad a Delfina Gómez cuando ella solo conoce el Sorora Grill.
No sé por qué, pero me imagino que Dresser llegó a poner su demanda con la actitud de Martita de Bayle con lentes oscuros afirmando que merece abundancia.
Jairo Calixto Albarrán
