El tercer gran bloqueo para lograr objetivos, personales o empresariales, es el entorno; entendido como la realidad personal que hemos construido.
"La mente es todo. En lo que piensas, te conviertes." – Buda
Este pensamiento inicial, inspirado en la filosofía de Buda, destaca la importancia de los pensamientos en la creación de nuestra realidad personal. Nuestras creencias y enfoques iniciales actúan como semillas que influyen en cómo percibimos y experimentamos el mundo que nos rodea.
Sin embargo, a medida que el tiempo avanza y nuestras experiencias se acumulan, entramos en una dinámica en la que nuestra realidad personal comienza a moldear y dar forma a nuestros pensamientos. Como el Dr. Joe Dispenza señala, "Nuestros pensamientos están unidos a una red de asociaciones neuronales basadas en nuestras experiencias pasadas. A medida que vivimos y acumulamos más experiencias, nuestras conexiones neuronales refuerzan y reflejan esas experiencias."
Este proceso de retroalimentación entre pensamientos y realidad puede llevar a un bucle que parece interminable. Las palabras de Jean-Paul Sartre, el filósofo existencialista, resuenan aquí: "La existencia precede a la esencia". Nuestras experiencias y la forma en que interpretamos nuestra realidad influyen en la esencia misma de quiénes somos y cómo interactuamos con el mundo.
Esto refuerza la idea de que nuestras experiencias pueden amplificar y perpetuar nuestros pensamientos originales, creando un circuito que parece difícil de romper.
El desafío radica en romper este bucle y redirigirlo hacia una dirección que te beneficie. Esto puede requerir una profunda introspección, conciencia de tus patrones de pensamiento y una valiente disposición a desafiar las creencias que te están limitando. La transformación consciente de tus pensamientos y la toma de decisiones deliberadas pueden interrumpir el ciclo y permitirte crear una nueva realidad personal, una que esté alineada con tus deseos y aspiraciones más elevadas.
Esta toma de conciencia nos empodera para cuestionar nuestras creencias limitantes y tomar decisiones conscientes que nos permitan crear una nueva realidad personal. Es un recordatorio de que somos capaces de moldear y redirigir nuestro camino, incluso cuando parecemos atrapados en un ciclo aparentemente constante.
En última instancia, reconocer este proceso cíclico puede empoderarte para tomar el control consciente de tus pensamientos y acciones, y así liberarte de los patrones restrictivos. Es un recordatorio de que eres el arquitecto de tu propia realidad y que, aunque puede ser desafiante, tienes el poder de moldear y recrear tu experiencia de vida a lo largo del tiempo.
¡Abrazos todos!