Política

Detrás de las vallas

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Las murallas que rodean Palacio Nacional fueron colocadas para “prevenir el acoso y no caer en la trampa de la violencia” y serán retiradas hasta después de las elecciones del 2 de junio, dijo el Presidente en la misa mañanera

El corazón simple de Gilga pregunta: si el pueblo cuida al Presidente, ¿por qué vive detrás de grandes vallas de acero? La respuesta presidencial también es simple y un tanto cuanto embustera: las vallas que rodean Palacio Nacional fueron colocadas para “prevenir el acoso y no caer en la trampa de la violencia” y serán retiradas hasta después del 2 de junio, dijo el presidente Liópez Obrador en la misa mañanera.

Así le preguntaron al Presidente y así respondió y así lo leyó Gil en Animal Político: en efecto se trata de una medida para evitar provocaciones de supuestas personas infiltradas en movilizaciones que buscan que haya represión durante el proceso electoral en curso. Como diría Carlos Marín en páginas contiguas y ayudado por la poesía: ¡ah chingá! Y el filósofo añade: lo que es, es, y lo que no es, pues no es. Será el sereno del verbo ser, pero Liópez vive amurallado y del pueblo ni sus luces, más bien lo que tenemos es a un Presidente protegido por vallas, un hombre que habla tres horas y luego desaparece.

Óiganlo por piedad: “Hay elecciones y hay quienes quisieran que hubiese represión, son tiempos de zopilotes, tenemos que actuar con mucha prudencia, presencia, paciencia y prudencia, las tres p, así como también se necesitan las tres c: cabeza, corazón y carácter. Por eso es mejor prevenir porque hay muchos infiltrados”. Según Gamés, faltan las tres emes que caracterizan al gobierno: mentiras, millones y miserables. A cada cual sus letras.

Va a llover

Total que las vallas serán retiradas después de las elecciones del 2 de junio, cuando el país inicie una etapa nueva y cesen los ataques a su gobierno. Ah, Liópez, siempre idéntico a sí mismo, no deja pasar un día sin agraviar e injuriar a periodistas e intelectuales con obsesión delirante y afirma que quitará las vallas cuando cesen los ataques a su gobierno.

“Para que no se haga daño al Palacio, pasando las elecciones… va a empezar a llover y va a haber menos calor, después del 2 de junio, va a ser distinto, es una etapa nueva”. Chiste malo, delirio preocupante.

De acuerdo con Liópez, el bloque conservador desearía que personas ingresaran al recinto para prender fuego, por eso el gobierno se protege.

Las vallas fueron colocadas después de que un grupo de manifestantes identificados como supuestos normalistas de Ayotzinapa arrojaron petardos a la fachada de Palacio Nacional en protesta por la liberación provisional de los ocho militares implicados en el asesinato de los 43 estudiantes. ¿Pues no que el Presidente iba a resolver con mil comisiones el caso y caza de Ayotzinapa?

La Secretaría de Seguridad Ciudadana informó que 26 policías resultaron lesionados por esquirlas de petardos y cohetones, la mayoría en las piernas, los brazos y los glúteos. De que son unos rufianes, nadie lo duda, eso que ni qué.

Mientras, el domingo se espera la marcha de la “marea rosa”, convocada por el frente Unid@s el mismo día que el tercer y último debate presidencial. La movilización tendrá como voceros estelares a la candidata presidencial Xóchitl Gálvez y al candidato a jefe de Gobierno por la Ciudad de México, Santiago Taboada.

Grandes líderes sindicales

Hace algunos días, Gamés vio entrar a Palacio Nacional a los líderes de los sindicatos de Pemex, del SNTE y del combativo SME. Con un cinismo a prueba de bochornos, los tres dijeron que ellos estaban con la doctora Sheinbaum. Los búfalos sueltos: Ricardo Aldana, Alfonso Cepeda y Martín Esparza traspasaron el umbral de la puerta de Palacio encantados de la vida.

En el día del maestro, Alfonso Cepeda, líder del SNTE, se despachó con el cucharón del puchero de los elogios, sumecha: “la verdad lo digo sin rubores: es un honor estar con Obrador”. Estaba en Palacio Nacional para celebrar a los maestros: “el presidente ha cumplido, no nos falló (…) deja un legado que no solo se expresa en el modelo de la nueva escuela mexicana, sino que tiene que ver con cientos de miles de plazas y respuestas a demandas económicas. Es un fiel defensor de la escuela pública (…) gracias Presidente”. Habrase visto semejante granuja. Ciertamente vivimos un regreso al futuro.

Todo es muy raro, caracho, como diría Gil Gamés: “De la leña caída todos hacen árbol”

Gil s’en va


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Gil Gamés
  • Gil Gamés
  • gil.games@milenio.com
  • Entre su obra destacan Me perderé contigo, Esta vez para siempre, Llamadas nocturnas, Paraísos duros de roer, Nos acompañan los muertos, El corazón es un gitano y El cerebro de mi hermano. Escribe bajo el pseudónomo de Gil Gamés de lunes a viernes su columna "Uno hasta el fondo" y todos los viernes su columna "Prácticas indecibles"
Queda prohibida la reproducción total o parcial del contenido de esta página, mismo que es propiedad de MILENIO DIARIO, S.A. DE C.V.; su reproducción no autorizada constituye una infracción y un delito de conformidad con las leyes aplicables.
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