Viajando en la carretera Victoria-Monterrey, a la altura de Santiago, NL, un automóvil que venía en el carril contrario, fue golpeado por un camión, con tal fuerza que lo hizo cruzar por encima del camellón central y llegar hasta el carril opuesto, donde fue nuevamente impactado, ahora por una camioneta.
Cuando el coche, muy destrozado, terminó de girar, pasamos justo por un costado del accidente y de inmediato nos orillamos para brindar auxilio a las personas afectadas.
Una joven que viajaba de copiloto y que se encontraba ilesa, estaba sacando por el lado del pasajero a la conductora: su abuelita, quien afortunadamente se encontraba también a salvo, solo con algunos jaloneos por el cinturón de seguridad.
Ambas en fuerte crisis nerviosa. El conductor del camión emprendió la huida, dejándolas abandonadas a su suerte.
Además de la inmediata respuesta de las autoridades de Nuevo León y los servicios de emergencias médicas, me llamó la atención la espontánea solidaridad de los automovilistas, que descendieron para ayudar a las afectadas.
Mientras nosotros las resguardámos en nuestro vehículo para tranquilizarse y ser revisadas por el equipo médico, otro conductor se acercó a darles botellas de agua y otros más a ayudarles a recuperar sus pertenencias del vehículo siniestrado. Algunos apoyaban a las autoridades a dirigir el tráfico para evitar más accidentes.
Rápidamente la grúa remolcó al vehículo averiado y el personal de servicio limpió los desechos de la carretera dejando limpia la escena en pocos minutos. Considero importante resaltar el respeto y la honestidad con que las diferentes corporaciones se comportaron durante el accidente.
La aseguradora AXA (no es un comercial, pero hay que reconocer su efectividad) también respondió de inmediato al llamado.
Finalmente, apoyamos a las dos personas del vehículo accidentado, llevándolas al corralón para el trámite del seguro y esperar a su familia. Salvo el susto, dimos gracias a Dios porque no hubo decesos ni heridos, y por la espontánea nobleza de la gente.
Y hay que decirlo, el coche era un Hyundai Elantra, que demostró una excelente respuesta en seguridad y sus pasajeras resultaron ilesas.
