Le fue bien a la Presidenta en su visita a Washington. Su asistencia al sorteo mundialista, con Donald Trump como anfitrión, fue símbolo y antesala de una temporada llena de definiciones, enormes retos y grandes oportunidades.
La comunidad internacional estará atenta a lo que suceda en torno a un balón que rodará por las canchas de Canadá, Estados Unidos y México.
Y mientras las porras, los cánticos, los gritos, las derrotas y las victorias se dejen sentir, Claudia Sheinbaum estará jugándose el futuro.
En 2026, la doctora tendrá que construir, entre tiros de esquina y remates de cabeza, alianzas que realmente le ayuden a resolver los dos temas más urgentes: la inseguridad y el estancamiento económico.
Pero no habrá paz, justicia y tranquilidad si no combate a la mafia obradorista. Ni llegará suficiente inversión si las empresas (nacionales y extranjeras) continúan temerosas ante las reformas, fuera de lugar, que impulsó AMLO (como la judicial).
Siendo una mujer inteligente y con la información que le brindan como jefa de Estado, conoce la putrefacción que invade a su movimiento. Sin embargo, también sabe que esas estructuras incrustadas en gubernaturas, legislaturas, fuerzas armadas, etcétera, la podrían faulear y hasta vencer.
Es decir, a Sheinbaum le espera un año de entrenamiento y preparación para, por una parte, enfrentar (¿adelantar?) la revocación de mandato y, por otra, depurar de narcopolíticos las listas de candidaturas rumbo al 2027.
Deberá driblar e investigar a esos personajes (cobijados por su predecesor) que, además, están en la mira de funcionarios norteamericanos por presuntos (algunos, más que obvios) vínculos con los cárteles.
Y volvemos a la foto de la semana pasada.
Esas primeras charlas, cara a cara, entre Sheinbaum y Trump, en medio del ambiente futbolístico, marcan el arranque de acciones conjuntas en materia comercial y de seguridad.
Si la Presidenta aprovecha el momento y arma una buena estrategia a favor de la sociedad (y no del hampa cuatrotera) podría meter gol, ganarle a los corruptazos y, ahora sí, comenzar una etapa de transformación.
No está fácil, pero 2026 es un año crucial para intentarlo.
Aquí entre nos
En un primer comunicado, la FGR señaló “delito de Terrorismo”, en el atentado con coche-bomba en contra de la policía comunal de Coahuayana, Michoacán.
Y sí, eso es. Aunque ahora lo quieran cambiar.