Que siguen creciendo las críticas al gobierno de Jaime Rodríguez Calderón por su decisión de mantener en vilo el regreso a clases presenciales.
Este fin de semana, el Instituto Welfare, de San Pedro, anunció que a pesar de que la administración estatal no se decide a dar a una fecha para la reapertura de escuelas, ellos harán “un regreso respetuoso y voluntario, con aforo reducido”, el próximo 30 de agosto.
“El 100% de nuestra comunidad nos apoya en el regreso presencial. Somos muy cercanos a nuestros padres de familia y tenemos su respaldo. Nos reunimos con ellos hace 2 semanas y tomamos la decisión en conjunto”, estableció ayer la institución en sus cuentas de redes sociales.
A esta postura de la institución sampetrina se sumó este domingo la bancada del PRI en el Congreso que, en voz de su coordinador, Álvaro Ibarra, advirtió que un tema tan importante como la educación no puede quedar en el limbo.
“Debe haber certeza a madres y padres de familia, a los alumnos y al personal docente para el regreso a clases”, exigió Ibarra, quien consideró contradictorio que actualmente los menores puedan asistir a muchos lugares, pero no a sus centros de estudio.
Este lunes, padres de familia solicitarán al Legislativo que considere a la educación como actividad esencial, por lo que los legisladores tendrán una oportunidad de oro para fijar una postura en un tema tan relevante para millones de nuevoleoneses.
Que luego de que la diputada independiente Claudia Tapia Castelo diera positivo a covid-19, en el Congreso estatal quedó prácticamente sepultada la posibilidad de un brote de la enfermedad.
Tanto las bancadas del Revolucionario Institucional como de Acción Nacional dieron a conocer que sus integrantes salieron negativos a las pruebas PCR que se practicaron por orden del área médica del Legislativo.
Y aunque se descartó el contagio, los legisladores se comprometieron a no bajar la guardia ni relajar las medidas de prevención ante el virus. _
