Que el gobierno morenista salió respondón a los dichos del PAN Tamaulipas acerca de la seguridad. En este nuevo capítulo de la tan afamada disputa, mientras el gobernador Américo Villarreal Anaya realizaba una gira por el norte, la administración los culpó de la situación durante su sexenio, llamándolos “destructores”.
Que esto vino a colación sobre una publicación de los azules acerca de la cifra de desaparecidos en la gestión de Andrés Manuel López Obrador, cuyas cifras ponían a la entidad como el sexto con más casos. Lo irónico, esto coincidió con más de la mitad del período de Francisco García Cabeza de Vaca en el Ejecutivo estatal.
Que los Verdes no se olvidaron del alcalde Carlos Peña y fueron a donar al área de atención animal vacunas antirrábicas, aunque la presencia del dirigente estatal Manuel Muñoz Cano y la diputada federal Casandra de los Santos se dio casualmente después de la gira del gobernador.
Que este viernes hay sesión en el Congreso Local y se deben aprobar las candidaturas para el Poder Judicial, pues el “pastor” legislativo, Humberto Prieto puso el plazo para el 31 de enero, sin embargo, el tema no aparece en el orden del día. ¿La aplanadora quiere destantear a los panistas que seguramente objetarán a Tania Contreras y Andrés García Repper?
Que no solo Morena anda moviendo la afiliación, Acción Nacional también hace lo propio y hasta organiza cursos de integración; en Ciudad Madero se tiene programado para el 22 de febrero, aunque es una plaza muy complicada para los azules, pero le van a hacer la lucha para atraer adeptos. Tiene tarea el doctor Francisco Castañeda, presidente local del partido.
Que el árbitro electoral Juan José Ramos Charre empezó a arrastrar el lápiz para echar números y ver cuánto le va a pedir al tesorero estatal Jesús Lavín, como ampliación de partida presupuestal para la elección judicial. El año pasado Adriana Lozano autorizó un extra para la elección de diputados y alcaldes; no hay peor lucha que la que no se hace.
