Que este sábado los priistas se desbordaron en apoyo a Geño. En un encuentro con militantes activos, cerraron filas con el ahora candidato verde al Senado, y sin rubor le lanzaron porras desde un Baltazar Hinojosa, un Oscar Luebbert, Carlos Solís, Sergio Guajardo, Gustavo Torres, Miguel Salum, Lupita Flores, hasta Oscar Pérez Inguanzo, y no faltaron neopanistas como Lupe González Galván.
Que “yo con Geño si jalo”, le dijeron, al tiempo que contaban anécdotas de los buenos tiempos. La pregunta es ¿cuántos de ellos lo habrán visitado cuando estuvo en la cárcel? como sea, la cargada parece ser una buena pala de tierra al ataúd del PRI, al grado de poder seguir los pasos del PRD y quedarse sin una sola curul de representación proporcional en el Congreso del Estado.
Que Marco Gallegos, diputado local que parecía se iba a quedar con la candidatura de Morena a la presidencia municipal de Reynosa, postulación que finalmente volvió a recaer en el hijo de Maki Ortiz, Carlos Peña, ya llevó su impugnación al Tribunal Electoral del Estado de Tamaulipas, donde se queja de su propio partido, pues no atendió su inconformidad. Se les junta la chamba a los magistrados electorales.
Que después que el alcalde con licencia de Matamoros Mario López se rebeló ante la decisión de poner a Alberto Granados como candidato a su sucesión y hasta llamó a no votar por Morena, se encendieron los focos rojos en la 4TT, pues de ganar la elección e ir a San Lázaro, no hay garantía plena de que Claudia Sheinbaum tenga en él un aliado, de llegar ella también a la Presidencia.
Que para que proceda una solicitud de asignar elementos de seguridad a los candidatos, en anteriores campañas se les ha pedido que prueben que corren algún riesgo, ¿cómo?, denunciando ante la Fiscalía si han sido amenazados o se han visto envueltos en alguna situación de peligro, pero así como así, difícilmente le van a poner escoltas a la candidata a senadora por el PT, Cendy Robles, como quiere.
Que vaya revuelo que causó el anuncio de Xóchitl Gálvez de que va a cerrar la refinería del sur de Tamaulipas, así como la de Cadereyta. ¿Y ahora con qué cara vendrá a Madero a hacer campaña por la Presidencia, cuando es evidente que ni hace a esta ciudad en el mapa de la República Mexicana? y mucho menos conoce lo que el complejo significa para la población de la urbe petrolera.
