Que aunque podría ser ratificado para el encargo por tres años más, nos cuentan que el actual presidente del Consejo Directivo del Sistema de Agua Potable y Alcantarillado de León (Sapal), Jorge Ramírez Hernández, no es muy bien visto que digamos por la actual administración con lo que todo indica que podría no ser incluido entre las propuestas para renovar el organismo.
Pues resulta que no gustó mucho en especial a la alcaldesa Alejandra Gutiérrez la manera en la que se llevó, por ejemplo, el caso de los trabajadores fallecidos en una planta de tratamiento de agua de la paramunicipal, quienes sufrieron la indolencia de la empresa frente a una situación sumamente crítica.
Que no es el único tema en el que se ha visto cuestionado el desempeño del también ex presidente de Coparmex pues habrá que recordar que cuando inició su gestión en la segunda vuelta de la administración de Héctor López Santillana se le acusó de estar detrás de la licitación de una obra de Sapal en favor de su cuñado.
Al que no ven nada mal para mantenerse al frente de la dirección es a Enrique de Haro, a quien ven como un experto en la materia y una buena opción para mantenerse en el cargo, sobre todo ahora que la ciudad requiere una mejor administración del recurso.
Que antes de que concluya el año se iniciará el traslado de internos de las cárceles con mayor problema de sobrepoblación al Centro de Federal de Reinserción Social del municipio de Ocampo, y todo apunta a que empezarán en Celaya e Irapuato, mismas que presentan una problemática seria.
El tema se manejará con total discreción por dos sencillas razones, primero porque los traslados son de riesgo dados los perfiles de internos que serán movidos al penal federal de mediana seguridad y dos para evitar amparos por parte de quienes les toque salir de los lugares donde hoy cumplen sentencia.
