Cuando Juan Carlos Osorio estaba al frente de la Selección Nacional nunca terminó por convencer sobre su estilo de juego. Ganaba los partidos moleros, pero aun así no era del gusto de muchos aficionados y periodistas.
El único encuentro que el TRI enamoró a todos fue contra Alemania en el Mundial de Rusia 2018 y al final nos dimos cuenta de que cualquiera le ganaba a los teutones.
Ahora con Gerardo Martino las cosas son muy distintas. La Selección gana y convence con su buen juego en la cancha. Independiente a los grandiosos números que lleva “El Tata” al frente del combinado Azteca, la huella del argentino se vio desde los primeros partidos.
A pesar de que algunos encuentros han sido complicados, siempre ha dejado buena espina esta Selección. La primera meta se cumplió y fue la Copa Oro, fue un inicio con el pie derecho para Martino.
El pasado partido ante Estados Unidos, México dio catedra de futbol y el primer gol fue una calca perfecta de lo que imprime “Tata” en este tricolor.
Lo siguiente que debe hacer el entrenador sudamericano es encontrar, formar y explotar nuevos juveniles mexicanos pensando en el Mundial de Qatar 2022.
Muchos que actualmente son los referentes tal vez ya no lleguen o no lleguen a buen nivel.
El regreso de la regla 20/11 le hará mucho bien no sólo a la Liga MX sino a la Selección Mexicana y al “Tata” Martino. Se vienen buenas cosas para el TRI.