América, Guadalajara, Cruz Azul y Pumas volvieron a coincidir con una victoria durante la misma jornada después de 4 años, es decir, 8 torneos transcurrieron para que los cuatro equipos más populares del futbol mexicano le regalaran una satisfacción a sus millones de aficionados durante el mismo fin de semana.
Habría que entrecomillar o al menos replantearse el término de “grandeza” en nuestro balompié, porque el único que hasta cierto punto ha honrado dicha reputación en la presente década es el América. El conjunto azulcrema ha calificado en todos los torneos, lidera la tabla de cocientes y es el campeón vigente. Por su parte, los Pumas están por cumplir 13 años sin ganar un campeonato, el Guadalajara 7, y el Cruz Azul lleva un título en los últimos 25 años.
Los “cuatro grandes” nunca han terminado un torneo ubicados en bloque dentro de los primeros cuatro lugares de la clasificación, y sólo en una ocasión (la temporada 83-84) disputaron las semifinales entre ellos.
Nadie va a escatimar la relevancia de los cuatro clubes más pasionales de nuestro balompié. Son los más taquilleros y mediáticos, y son los únicos que tienen aficionados más allá de su ciudad o su región, empero, la grandeza se tiene que refrendar en cada competición, donde se construye el prestigio deportivo de los equipos: en el terreno de juego.
En ese rubro, varios clubes le han recortado distancia o incluso le han comido el mandado a “los cuatro grandes”. Los Tigres, el León, el Toluca los Santos y el Pachuca, son equipos que han ganado campeonatos y que tienen gran arrastre en su región, pero que no despiertan pasiones ni cuentan con un número importante de seguidores en el resto del territorio mexicano.
En el entorno de los “cuatro grandes” influyeron otros factores extra deportivos para poder posicionarse como equipos de convocatoria en todo el país. El más determinante: el impulso de los “medios nacionales”, sobre todo de las televisoras que durante varias décadas monopolizaron el espectro y enajenaron a millones.
La historia del Guadalajara surge con las películas en blanco y negro, se consolida como el bueno de la trama y después aparece el América como el antagonista de la misma. Más adelante irrumpen el Cruz Azul y los Pumas, estos últimos con el impulso de una corriente antiamericanista, o más bien “anti Televisa”.
Durante la primera quincena de marzo el América y el Guadalajara se enfrentarán en tres ocasiones, primero, a ida y vuelta en la ronda de matar o morir por los octavos de final en la Copa de Campeones de la Concacaf, y como postre, en el marco del clásico nacional de la jornada 12 del torneo clausura 2024 de la Liga MX.
Al futbol mexicano le viene de maravilla que sus dos máximos exponentes se enfrenten en un lapso tan corto, con tanto en juego en cada encuentro.
El repunte de los “cuatro grandes”, llamados a ser protagonistas de este torneo, le está dando un sazón muy especial al actual campeonato.
