En julio pasado Omar Fayad ya había dicho que no estaba de acuerdo, cosa que comparto por completo con él, de hecho, rechazó la propuesta en su momento.
Sin embargo, y a pesar de su veto, se le dio la razón al Congreso del estado y este jueves se dijo que sí, que, desde ya, las peleas de gallos serán patrimonio cultural inmaterial de Hidalgo, bueno la palabra correcta es “combate de aves”.
Recuerde que en el 2018 Morena presentó este asunto y de la mano de alguien que se sabe estaba bien metido en este negocio.
Es obvio que esto tiene totalmente el tinte económico, es más allá de la cultura, es todo un mundo que mueve muchísimo dinero, aunque usted no lo crea, no solo es la crianza de gallos, es sobre todo las apuestas que se dan en cada palenque, en cada espacio donde a partir de ahora podrá usted decir que es permitido. Esto último es el trasfondo verdadero de todo este asunto.
Zacatecas, Aguascalientes, Tlaxcala, Nayarit y ahora Hidalgo son los estados de la República que ya le entraron a este tema del supuesto patrimonio cultural, pero es sabido por todos que son los grupos de galleros los que están detrás de todo esto; y es que estamos hablando de una industria que tiene más o menos mil 200 asociaciones y clubes de criadores de gallos de pelea, que según ellos mismos genera miles de millones de pesos al año y sí son legales, obvio es que dan sus impuestos correspondientes, entonces resultaba lógica esta denominación, había que proteger los dineros.
En una de esas querido lector, hasta patos, águilas y halcones veremos pelear, esto es en lo que invierte el tiempo nuestro Congreso, dejando en el tintero temas que resultan ser mucho más relevantes.
David Aarón Cárdenas
daac_cardenas@yahoo.com.mx
