En su momento fue el ejemplo del Gobierno Federal, con Luis Echeverría parecía que la bonanza nunca se iría de este terruño hidalguense, docenas de grandes empresas se habían asentado en este lugar, miles de trabajadores jornada con jornada trabajaban para llevar sustento a su hogar, pero, así como llegó, se esfumó, el sindicalismo la exterminó, y lo que fue en su momento un estandarte de prosperidad a nivel nacional, termino siendo prácticamente un pueblo fantasma.
Hoy esa historia parece que de a poco quiere cambiar, el anuncio hecho este miércoles en un famoso hotel de la Ciudad de México, del establecimiento de una armadora automotriz en Ciudad Sahagún, a más de uno lo tomó por sorpresa.
Y es que, con esto, Hidalgo retomará la vocación de producción automotriz, que por allá de 1986 fue interrumpida cuando cerró sus puertas la armadora Renault.
En este 2017 será JAC Motors, empresa de origen chino quién, apostándole a la mano de obra mexicana, se asentará en parte de los terrenos donde por muchos años se fabricaron los camiones de DINA.
Aprovechará esos terrenos ya que ahí se encuentra la empresa Giant Motors Latinoamérica, que desde hace 10 años hace camiones para el marcado nacional y es con quien se asoció para producir sus autos en territorio mexicano.
En un principio serán autos para el consumo nacional, pero se espera que sea el trampolín para empezar a exportar al resto de América Latina, lugar donde JAC ya tiene presencia y vende bastante bien.
Así que calladito y sin chistar el miércoles, el gobernador Omar Fayad presentó pues, tan importante proyecto para el Estado de Hidalgo.
Llenándose la boca de regocijo, pidiendo que a los cuatro vientos se mencionara el hecho y sí, la “neta” es que dejó a varios calladitos.
La historia nos dice que fue el ex gobernador Francisco Olvera Ruiz quién desde su sexenio, empezó a coquetear con la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz, para invitarlos a mirar a esa zona de Hidalgo, no olvide que la planta armadora BMW estuvo muy cerca de quedarse acá, y no lo hizo según esto porque había falta de infraestructura carretera y de vivienda.
Por si no lo sabe atraer este tipo de inversiones a un Estado no es fácil, se deben de incentivar a los posibles inversionistas con algunos “terrenitos”, apoyos fiscales, buena mano de obra, buen clima social y dos o tres monerías más.
Aquí es donde entró Carlos Slim, ya que desde hace varios años tiene inversiones en Hidalgo y con esta última muestra que viene con todo, él es el dueño de Giant Motors e Inbursa quienes fueron los que inyectaron el dinero necesario para que este sueño se cristalizara. Y aquí también más de uno ya se desgarró las vestiduras criticando que sea este hombre el que esté haciendo esto.
La cosa es que la armadora estará y los autos se fabricarán, ¿Beneficiará al Estado? Por supuesto que sí, ¿Será de ayuda para el trabajador Hidalguense? Yo también creo que si ¿Tendrá sueldos competitivos? ¿No habrá corrupción de por medio? ¿Darán prebendas a políticos por esto? ¿Nos llenaremos de chinos por aquella zona? Todas estas preguntas son para mí un simple: “no lo sé”. Tendremos que esperar para ver cómo las cosas se empiezan a dar.
Le aclaro nada más que no es solo llegar, poner la fábrica y listo, no, la cosa no es tan sencilla, es mucho más compleja de lo que podemos creer, será también mucha responsabilidad de los industriales del sector metalmecánico de Ciudad Sahagún estar a la altura del proyecto, caso contrario será otros (de fuera) los que terminen siendo beneficiados.
Esperemos entonces que, así como Cristo resucitó al tercer día, Ciudad Sahagún después de más de 30 años resucite para comenzar a ser un verdadero polo industrial.
Que pase un excelente fin.
dacc_cardenas@yahoo.com.mx