El escritor colombiano Gabriel García Márquez construyó uno de los personajes femeninos más entrañables de la literatura latinoamericana: Úrsula Iguarán (Cien años de soledad, 1967).
Mujer de ímpetu e inteligencia. Supo afrontar la vida desde el núcleo. Fue proveedora, trabajadora y muy vivaz. Prácticamente fungió como engranaje de toda la historia familiar de los Buendía.
El personaje femenino de GGM es terrible, abrumadora, sagaz, insistente, precavida y -muy a su modo- temerosa. También tiene como características la tenacidad e ímpetu. Es ejemplar y conmovedora.
Úrsula es un personaje que, con gran espíritu, enfrentó los diluvios macondianos y el día en que fue sepultada, un intenso calor abrazó a todo el pueblo… se relata.
En la ficción literaria –un paralelismo con la realidad-, el personaje de la mujer tiene gran significado y presencia: además de diferentes ángulos, pero siempre sobresalen, sí, los retratos de dignidad y fortaleza. La vida más allá de sus adversidades, las heroínas.
Retratos psicológicos diversos. Personajes literarios inolvidables que se convierten en punto de partida y de entendimiento humano. En estos personajes femeninos conviven todos los atributos y pasiones; las partes y las contrapartes: Lo blanco y lo negro.
Son mujeres que en realidad ficcionada rompen filas, vencen tabúes, se adelantan a su época o simplemente enfrentan con dignidad su destino adverso. Mujeres de fuerza y excepcional personalidad. Por ejemplo.
Fortunata, (Fortunata y Jacinta, Benito Pérez Galdós) Doña Jimena Díaz, (El cantar del mío Cid, Anónimo); Ana Ozóres, (La Regenta, Leopoldo Alas «Clarín»; Constance Chatterley, (El amante de Lady Chatterley, D.H Lawrence); Emma Bovary (Madame Bovary, Gustave Flaubert).
Elizabeth ‘Lizzy’ Bennet, (Orgullo y prejuicio, Jane Austen); La Maga, (Rayuela, Julio Cortázar); Emma Zunz (Emma Zunz, Jorge Luis Borges); Hester Prynne, (La letra Escarlata, de Nataniel Hawthorne); Carlota de Habsburgo (Noticias del imperio, de Fernando del Paso); Zoé (El retrato de Zoé, cuento –entrañable- de Salvador Elizondo); Marcela, Silvina, Sabina (Alta Infidelidad, -esplendidos personajes- de Rosa Beltrán); Sara Gómez (Los aires difíciles, Almudena Grandes); Monse y Teresa, (La oscura historia de la prima Monse y Últimas tardes con Teresa, Juan Marsé).
Jane Eyre ('Jane Eyre', de Charlotte Brönte); La chilena (Travesuras de una niña mala, Mario Vargas Llosa); Florence (Chesil Beach, IanMcEwan), Lola Vendetta, ('Lola Vendetta, Raquel Riba Rossy), Lisbeth Salander, (La chica que jugó con fuego –de la saga Millennium- de Stieg Larsson), Isadora Wing, (Miedo a volar, de Erica Jong).
Por nombrar algunas… como Lupita, protagonista de la pieza teatral El eterno femenino, escrita por Rosario Castellanos, encuentro literario básico en estos días nuestros.