Hablar de Segalmex es hablar de uno de los casos de corrupción e impunidad más emblemáticos del gobierno de López Obrador. Supera por mucho a la “Estafa Maestra” del sexenio peñista, incluso el monto de las irregularidades es mayor que el presupuesto anual del Instituto Nacional Electoral, el cual es criticado de ser “caro” por el oficialismo.
Seguridad Alimentaria Mexicana, o Segalmex, nace en el actual gobierno lopista. Con su creación se pretende alcanzar la autosuficiencia alimentaria del país. Opera programas como Precios de Garantía y entrega de fertilizantes. Las señales de alerta del desmedido saqueo en Segalmex estaban ahí a la vista, pero seguimos permitiendo la corrupción y los abusos.
Los primeros indicios del saqueo se presentaron tras la publicación del informe de la Cuenta Pública 2019 por la Auditoría Superior de la Federación (ASF). Sólo en ese año detectó en Segalmex, junto a Diconsa y Liconsa, más de 4 mil millones de pesos en irregularidades, entre compras fantasma, contratos con empresas sin trabajadores, productos faltantes o echados a perder.
Sumando las anomalías detectadas por la ASF en la Cuenta Pública 2021, el saqueo de Selgamex superó los 15 mil millones de pesos en 3 años. Es prácticamente la mitad de los recursos públicos que administró en ese periodo. Un ofensivo récord.
Queda claro que persiste la corrupción e impunidad en el uso de los recursos públicos de todos los mexicanos. El actual gobierno federal se ha dedicado a debilitar los mecanismos para prevenirlo y combatirlo, como el Sistema Nacional Anticorrupción y la Auditoría Superior de la Federación. El presidente niega sistemáticamente cualquier investigación al respecto, acusando de campañas en contra orquestadas por enemigos imaginarios. Decían que no son iguales, pero los ecos del viejo régimen están más presentes que nunca y amenazan con quedarse otros seis años.
No podemos aceptar ni resignarnos a escuchar de estos casos de abusos que se encuentran bañados de impunidad. Es dinero que aporta la sociedad y no es usado como se debe aplicar.
¿Para eso quieren llegar al poder?, lo único cierto es que nada ha cambiado, seguimos arrastrando el doloroso peso de la corrupción e impunidad y siguen siendo indiferentes ante las consecuencias que dejan los abusos de su propia gestión en el día a día de este país.
Esta administración no puede combatir la corrupción porque la corrupción es la esencia del gobierno.