Mientras la gobernadora Delfina Gómez ha regresado a Texcoco -su tierra- en cuatro ocasiones, para agradecer con trabajo y obra a su gente, en tanto despunta su programa “Mujeres con Bienestar” que arrancó con gran participación por parte de la población femenina, los partidos políticos se reportan listos para ir a la elección intermedia.
Y pese a lo dicho por el PRD-Edomex, en torno a ir solo a la contienda del 2024, es evidente que su convenio con el PRI y el PAN sobrevivirá en la mayoría de los 125 municipios de la entidad; a la postre su capital político está lejos de alcanzar para obtener grandes resultados el 2 de junio próximo.
De acuerdo con el líder de los diputados del PAN en el Congreso local, Enrique Vargas del Villar, estos partidos únicamente contenderán en solitario en 25 o 20 demarcaciones donde podrían tener la victoria asegurada, mientras que en los distritos federales y locales irán en alianza al cien por ciento.
Así, la triada buscará conservar y ampliar el llamado corredor azul, donde al menos el PRI y el PAN cuentan con candidatos fuertes. El PRD en cambio, podría resurgir en el sur mexiquense, donde se registra un reagrupamiento importante de los “amarillos”, y donde ningún partido tiene nada seguro, debido al voto voluble de los sureños.
La apuesta es clara: atajar a Morena en los municipios y distritos más importantes y reposicionarse en aquellos donde el partido guinda no ha hecho buen papel. Pese a lo que se diga, la mesa de diálogo entre las tres fuerzas políticas es permanente, y en breve se darán a conocer los nombres de los alcaldes y los diputados locales que podrán ir por la reelección; por el momento cada fuerza partidista analiza la selección de sus cuadros antes de que decidan emigrar al partido guinda o al verde, porque los “chapulines” abundan.
