Seamos sinceros: sí hay un cerco informativo, sí hay una campaña de desprestigio en contra de los medios públicos mexicanos.
Es tan obvia como estúpida porque las audiencias no son tontas. Saben qué medios y qué comunicadores las quieren engañar.
Por más que le muevan al WhatsApp, a X y a TikTok, los números no mienten. Esto sí está funcionando y ni remotamente es como nos quieren hacer creer.
Se lo voy a preguntar tal cual: ¿Qué dicen en muchos lados de la televisión pública?
Que la perdimos, que está del lado del poder, que sólo hace propaganda.
Pues yo no sé qué canales están viendo porque yo veo de todo en todas partes y a las pruebas me remito:
¿Cuál es el programa de televisión más visto de México y de toda Hispanoamérica? “La rosa de Guadalupe”. ¿Quién es el eje de esta producción del inmenso Miguel Ángel Herros? La Virgen de Guadalupe.

¿La Virgen de Guadalupe trabaja para AMLO? No, ¿verdad? ¿Podríamos decir que la perdimos, que está del lado del poder o que sólo hace propaganda?
¡Nunca! ¡Para nada! Ella es “nuestra madre”. Nos “une”. Merece respeto.
¿Sabía usted que la televisión pública mexicana produjo una grandiosa serie documental sobre la Virgen de Guadalupe?
Me imagino que no porque, insisto, de lo que se trata es de manipularlo, de que estas cosas no se sepan, de que usted se quede con una pésima impresión de estas frecuencias para que odie al gobierno, para que se ponga en su contra.
Por si esto que le acabo de decir no fuera lo suficientemente relevante, esta serie documental es una joya cinematográfica hecha con toda la mano y con toda la creatividad.
Si yo fuera Netflix, MAX o Disney+ me sentiría irremediablemente celoso porque es exactamente lo que le falta a marcas como Discovery y National Geographic.
Para no hacerle el cuento largo, esta superproducción se llama “¿Dónde anda Lupita?”, se transmite los viernes como hoy a las 22:00 por Capital 21 (el canal público de Ciudad de México) y, lo más generoso de todo, queda “viva” en YouTube para que usted la goce gratis sin importar el estado o el país en el que viva.
¿Cómo le quedó el ojo? Y no, ni empiece a intrigar. Cuando digo superproducción, créame, estamos hablando de un trabajo que se filmó en plazas como Palestina y Nueva York.
¿Cuántas televisoras conoce usted que manden gente a recorrer el mundo para grabar documentales?
¿De qué trata “¿Dónde anda Lupita?”? No le voy a vender trama para no arruinarle la experiencia pero es la primera gran serie documental que se hace en México sobre Santa María de Guadalupe.
Y contrariamente a lo que la oposición pudiera suponer, no parte del supuesto de que la Virgen de Guadalupe es una mentira, que jamás se apareció ni ninguna de esas ideas que tanto les gusta mover para asustar a las audiencias.
Es un acto de amor, de inteligencia, de profesionalismo. No sabe usted qué cosa tan más bonita.
La meta es entender la importancia de la Virgen Morena tanto en México como en los rincones más alejados de mundo y de charlar lo mismo con devotos de los países musulmanes que con bibliotecarias estadounidenses.
¿Cuál es la nota? Que aquí se dicen cosas importantes que no son las que nos dicen cada vez que se acerca el 12 de diciembre.
Si el capítulo uno es fantástico, cuando usted llegue al dos va a flotar. No va a dar crédito de lo que pasa ahí en términos sociales, en términos culturales.
Lo del “Nican Mopohua” es bellísimo y no sé usted, pero yo estoy convencido de que todos los guadalupanos lo deberían saber.
Gustavo Martínez Contreras (el genio detrás de este concepto) y sus compañeros, en verdad le están haciendo mucho bien al mundo con este trabajo.
Los felicito de corazón porque, además, tienen algo precioso en Instagram titulado “whereslupita” que ayuda a entender lo que está pasando aquí.
Esto es como “La rosa de Guadalupe”, pero de los medios públicos. “La otra rosa de Guadalupe”. El complemento que hacía falta.
Luche con todas sus fuerzas por ver “¿Dónde anda Lupita?” esta noche, a las 22:00, en Capital 21 o prográmese para disfrutarla en YouTube. Le va a gustar. De veras que sí.