Ayer 14 de noviembre fue un día histórico en Pachuca porque las calles se llenaron de jóvenes, sin colores partidarios, sin sesgos políticos, sin intereses mezquinos, salieron a las calles para ser la voz de quienes no pueden hacerlo, porque no están, porque están ausentes, en medio de una política indiferente.
Hoy en medio de la crisis de inseguridad que vivimos, hay una luz de esperanza y está en nuestra juventud, es tal vez la primera manifestación de esta naturaleza en Hidalgo, donde no participaron grupos políticos, partidos, sindicatos, o grupos facciosos para controlar, manejar y manipularlos, con intenciones político-electorales. Fue una marcha llena de energía, pacifica, libre, sin violencia y legítima.
Y las instituciones de educación superior no deben y no pueden olvidar que son el espacio que debe alentar el pensamiento crítico y objetivo.
Por cierto, la gran ausente, para no variar, la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Hidalgo, ¿Qué en serio no hay violaciones a los derechos humanos en medio de esta crisis?, el mejor aliado de un gobierno es la verdad, no las complicidades.
La voz de la juventud fue clara: bájense de los autos lujosos, dejen a sus choferes y escoltas, caminen por las calles obscuras e inseguras, y veremos si les genera un poquito de empatía.
Hoy se dieron cuenta que no basta con traer artistas como Steve Aoki, o eventos populares para ganarse la confianza y el respeto de una juventud hidalguense que está despertando, como bien gritaron no, no son porros, no pintaron o rayaron paredes, y sobre todo no estaban encapuchados, porque querían darle rostro a quienes están ausentes.
Nunca olvidaré lo conmovedor y motivante que fue escuchar gritar a todxs como propio; el nombre de diversas universidades, públicas y privadas, todos unidxs en una sola voz, una sola lucha. Bien por las y los universitarios de escuelas públicas y privadas como el CREN, CENHIES, CUDI, IPN, ITLA, ITP, La Salle, Normal Superior, UAEH, UCEM, UPMH, UPN, UPP, UPT, UTMIR, UTVM y muchas más.
Twitter: @alfreduam
