La empresa de servicios inmobiliarios Cushman & Wakefield informó que el precio de renta en la industria de oficinas en Monterrey mostró un incremento de 2.7 por ciento, principalmente por la fluctuación del tipo de cambio y las presiones económicas globales.
Esquemas de coworking
En su reporte, la empresa señaló que otro factor que ocasionó esta alza en las tarifas fue la entrada al mercado de nuevos espacios acondicionados, que suelen ofrecer mayor flexibilidad operativa.

Sin embargo, la empresa informó que la demanda general mostró una ligera desaceleración respecto a trimestres anteriores, impulsada por la migración de varias empresas hacia esquemas de coworking como estrategia para reducir costos y mitigar riesgos ante la incertidumbre económica y política internacional.
Por otro lado, señaló que las empresas nacionales han mantenido una presencia más activa, incrementando su participación en el mercado y mostrando una mayor preferencia por espacios en obra gris, los cuales representaron el 49.6 por ciento de las transacciones cerradas durante el trimestre.
En este sentido, indicó que las las compañías globales e internacionales continuaron implementando estrategias de downsizing y optando por espacios ya acondicionados o amueblados, buscando optimizar recursos y minimizar riesgos ante la actual volatilidad del entorno económico.
“En anticipación al último trimestre del año se espera que el mercado mantenga una tendencia estable, con una posible moderación en la absorción neta y ajustes marginales en precios, principalmente condicionados por el comportamiento del tipo de cambio y la evolución del panorama macroeconómico internacional”, señaló Cushman & Wakefield.
Asimismo, informó que la evolución que ha tenido el mercado de oficinas en la Ciudad de México ha estado altamente influida por los cambios en la forma de organización de las empresas de todos los giros.
“Dichos cambios han estado marcados por el avance tecnológico. Se estima que la combinación de trabajo presencial con el teletrabajo ha disminuido la intensidad de uso de espacio de oficinas por empleado, lo que ha resultado en un 30 por ciento menos de absorción que la observada hace diez años para el mismo número de empleados”, precisó.

KL