El aumento propuesto a los aranceles de importación por parte de la presidenta Claudia Sheinbaum, puede generar presiones inflacionarias y afectar directamente el poder adquisitivo de las familias mexicanas, advirtió la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex).
A través de un comunicado, el organismo empresarial reconoció la importancia de fortalecer la industria nacional y el esfuerzo del gobierno por impulsar la producción interna.
Sin embargo, subrayó que cualquier decisión en esta materia debe tomarse con la participación de los sectores productivos.
“Coincidimos en la necesidad de impulsar la producción interna y de establecer condiciones más justas frente a prácticas desleales de comercio internacional", indicó.
"No obstante, cualquier ajuste debe implementarse con gradualidad y sustentado en análisis técnicos que reflejen la capacidad real de los sectores productivos del país”, señaló la Confederación en el documento.
Estas son otras afectaciones que generaría la iniciativa
También alertó que una aplicación abrupta podría generar disrupciones en las cadenas de suministro así como desabasto y un impacto inflacionario que termine perjudicando “a quienes menos tienen”.
Además, destacó que la industria mexicana aún no cuenta con la infraestructura suficiente para sustituir de manera inmediata los bienes importados, por lo que los productos más afectados serán de los sectores de:
- Calzado
- Electrodomésticos
- Artículos escolares
- Juguetes
- Utensilios del hogar
Los cuales apuntó, que se podrían encarecer de manera significativa si los incrementos a los aranceles se aplican sin transición, ya que los ajustes propuestos elevan los costos de los insumos pero no los de los productos terminados.
No obstante, Coparmex refirió que esto podría generar distorsiones que reduzcan la competitividad de las empresas mexicanas y afecten la estabilidad del mercado interno.
Ante este contexto, también expuso que la imposición de cuotas compensatorias o precios mínimos de importación, combinados con cargas administrativas, pueden actuar como una barrera de acceso para el comercio formal.
“Cuando los costos se elevan de manera artificial, los consumidores suelen recurrir a canales informales, incentivando el contrabando y la pérdida de recaudación fiscal”, indicó.
De acuerdo con la Confederación, algunos de los productos incluidos en la propuesta podrían pasar de tasas de 0 por ciento hasta 35 por ciento lo que generaría un impacto severo en los sectores donde la participación de bienes importados es alta.
“Un aumento de esta magnitud provocaría presiones inflacionarias innecesarias, afectando la estabilidad económica, limitando el consumo y dificultando los esfuerzos por reducir la pobreza”, subrayó.
En este sentido, reiteró que si México adopta incrementos abruptos sin atender su estructura industrial, “el efecto sería contrario al deseado”, ya que las cadenas manufactureras mexicanas perderían competitividad, por lo que se perdería el objetivo regional de atraer inversión, generar empleo y ganar mercado frente a Asia así como Europa.
Por ello, la Coparmex insistió en que los ajustes arancelarios deben ser graduales y compatibles con la capacidad productiva local, de manera que refuercen la integración del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC)y la consolidación del llamado Plan México.
KL