La Fiesta de la Fórmula 1 volvió a producirse en el Autódromo Hermanos Rodríguez, donde en el primer día de pruebas se combinó el sonido de los motores con la música del mariachi y se brindó con tequila Patrón para celebrar los 10 años del Gran Premio de México.
Si bien es cierto que este año, Checo Pérez no estará en la pista, la marca que lo patrocina mantuvo el ambiente de fiesta en la suite 8 de la zona Main Grandstand Club 1, donde desde muy temprano los invitados llegaron para disfrutar las diversas experiencias que ofreció.
Para empezar y mientras en la zona de pits, los staffs de cada escudería afinaban detalles de las potentes máquinas, a los invitados se les ofreció un menú variado, que incluyó frutas, yogur, Pan de de muerto de Roseta y café de olla para acompañarlo o bien tacos de birria dorados, una variedad de quesos y hasta el clásico huevo con jamón para el desayuno y para la comida, lasaña, salmón, pescado, puntas y arroz; todo esto en la zona que Patrón compartió con otras marcas.
Mientras que en su suite, la exclusividad del destilado se materializó con la diversidad de cócteles que se sirvieron, desde el Mango Salad con Tequila Patrón Cristalino, mango, tomate y vainilla; hasta Discreto, una propuesta que realmente concentra su nombre en su sabor; y que se crea a partir de Tequila Patrón Silver, Vermouth, Martini Dry, St Germain, salmuera y agua tónica.
Así que para cuando el reloj marcaba las 12: 30 y el sonido de los motores acaparó la atención de los invitados al iniciarse la primera prueba del día, el destilado ya era apreciado en la cata espontánea que disfrutaron los invitados y que prevaleció durante toda la jornada, en la que el neerlandés, Max Verstappen de la escudería Red Bull, demostró su poderío al posicionarse en el primer lugar, durante la segunda prueba del día que inició apenas unos segundos después de las 4 de la tarde.
Para entonces la fiesta no solo se producía en la pista con el cúmulo de emociones que provocaban los pilotos en las dos pruebas que protagonizaron, sino también en las diversas zonas que forman parte del Gran Premio de México.
A la entrada de la puerta 6 del Autódromo Hermanos Rodríguez, el mariachi alegraba al público con su versión de "La boda del huitlacoche"; mientras que en los pasillos, los apasionados del automovilismo aprovechaban los escenarios para tomarse la selfie o bien para adquirir los productos conmemorativos por los 10 años de la Fórmula 1 --las gorras se vendieron a 2500 pesos--, o bien de las diversas escuderías --cuyos precios oscilaron entre 1800 y 3500 pesos.
Mientras que en la suite número 8, los invitados ya portaban gorra, playera o bolso de tequila Patrón y mantenían el entusiasmo ante las pruebas que revelaron que el piloto de Red Bull lleva la delantera en el camino al Gran Premio de México, que se entregara el próximo domingo.
AJR
