La Secretaría de Desarrollo Sustentable aventó la responsabilidad de la operación de las concreteras en la zona del Huajuco al municipio de Monterrey, al considerar que, al menos con el Estado, no tienen irregularidades por no afectar el área natural protegida.
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Luego de su comparecencia en el Congreso del Estado, el funcionario estatal aclaró que las tres concreteras fueron suspendidas por no cumplir con las normativas ambientales, una de ellas realizó las inversiones para regularizarse y controlar sus polvos, otra abrió bajo la suspensión de un amparo y una tercera permanece cerrada desde hace varios años.
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En este sentido, detalló que si llegasen a incumplir con una licencia de uso de suelo esa ya es competencia del Ayuntamiento.
"Las medidas ya las tomamos desde hace unos meses y básicamente que hay una situación de que la licencia o el uso del permiso de suelo es municipal, yo creo que si hay alguna irregularidad en ese sentido el municipio es el encargado de atenderlas.
"En temas ambientales, nosotros les pusimos un programa de regularización, de esas tres concreteras ya hace una buena cantidad de meses, una sigue cerrada, otra hizo las obras que debería para evitar la contaminación y otra con una suspensión por un amparo abrió".
En un recorrido de MILENIO Monterrey por la zona residencial, vecinos del sector refirieron que llevan más de 37 años viviendo en la calle Cañón del Huajuco y aproximadamente hace siete años fue cuando se instalaron las plantas.
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