Con la incertidumbre de saber si las cenizas que les entregaron realmente pertenecen a sus seres queridos, decenas de familias que pagaron por el servicio de cremación en Ciudad Juárez, Chihuahua, buscan saber si alguno de los cuerpos que fueron abandonados en el crematorio son de sus familiares, para poder darles sepultura.
Luego del hallazgo de 383 cuerpos abandonados en el crematorio Plenitud, familiares exigen que las autoridades les den certeza, pues ahora no saben con qué llenaron las urnas que el crematorio les entregó.
“Siento como si mi mamá, en caso mío, ¿verdad?, como si mi mamá hubiera sido un trapo viejo y fueron a arrumbarlo ahí, eso es lo que yo siento al darme cuenta de todo esto”, dijo Ariana Estupiñán, quien busca el cuerpo de su madre.
Cinco funerarias entregaban los cuerpos a este crematorio y pagaban para que los convirtieran en cenizas, pero no lo hicieron. En el establecimiento se encontraron los restos arrumbados y se desconoce con qué llenaron las urnas que recibieron los deudos.
Según las investigaciones, esto ocurrió por lo menos durante los últimos cuatro años.
“Vengo a ver si mi mamá está en el crematorio, este… ella fue cremada en diciembre del 2024, y fue por parte de la funeraria Latinoamericana. Entonces quiero ver si ella no está aquí y pues, si es así, pues darle seguimiento a todo esto porque no se me hace bien lo que hicieron y pues prácticamente llevo mi luto todavía y como para saber que mi mamá está ahí, no se me hace justo la verdad”, explicó Ariana.
“Pues esto es algo muy impactante para nosotros como familiares porque imagínese, se nos entregó una urna, y pues nosotros pensamos que ahí se acaba o no precisamente que se acabe el duelo, pero se acaba el proceso, y pues resulta que no. Ahora queremos saber si realmente son nuestros familiares y, si no, recuperar sus restos”, añadió Gloria Criollo, quien busca los cuerpos de sus padres.
El crematorio Plenitud, en la colonia Granjas Polo Gamboa, operaba con total impunidad, el horno y dos cámaras de refrigeración no sirven y tampoco cuentan con servicios de luz, agua, ni gas. La última vez que fue a visitarlos la Comisión Estatal de Protección Contra Riesgos Sanitarios fue en marzo del 2022.
Además de estafar a la gente, trataron sin respeto los cadáveres que recibían, por lo que el dueño, José Luis “N” y su empleado, Facundo Teófilo “N”, ya fueron detenidos.
Esta situación detonó el jueves pasado cuando un ciudadano reportó que había visto un cuerpo abandonado dentro de un vehículo en el lugar.
Cuando se le realizó una revisión, comenzaron a encontrar decenas de cadáveres en varias habitaciones, los restos estaban apilados, sobre el piso o el mobiliario. Otros con objetos encima, mientras que varios rodeados de ratas y gusanos.
“Prácticamente todo el inmueble que estaba adyacente al crematorio, que hacía de oficinas y de casa habitación, todos los cuartos tenían cuerpos apilados, uno a uno, con escenas dantescas”, dijo César Jaúregui, fiscal general de Chihuahua.
“218 son masculinos, 149 femeninos y 16 se encuentran aún como indeterminados (…) Ya tenemos 15 personas con nombre probable”, añadió Javier Sánchez, director general de servicios periciales.
Mientras la fiscalía identifica todos los cuerpos e investiga si hay más implicados, incluyendo autoridades sanitarias, los dos detenidos permanecerán en prisión justificada un año y, de ser encontrados culpables, podrían ser sentenciados hasta a 19 años de cárcel.
En la audiencia realizada en contra del propietario del crematorio, José Luis “N” y de uno de sus trabajadores, Facundo Teófilo “N”, se dio a conocer que la última revisión realizada por la Comisión Estatal de Protección Contra Riesgos Sanitarios fue el 7 de marzo del 2022.
Ambos fueron acusados de ocultar y conservar cadáveres, delitos del fuero común y federal, respectivamente; contemplados en la Ley General de Salud, por lo que se les impuso la medida cautelar de prisión preventiva.
En la diligencia también se dio a conocer que el horno crematorio y las cámaras de refrigeración estaban fuera de funcionamiento, además de que el inmueble no contaba con energía eléctrica ni agua potable, y que el dictamen de impacto ambiental venció el 3 de marzo del 2023, por lo que operaba de manera irregular.
De acuerdo con los peritajes, los cadáveres habían sido embalsamados, y los datos sugieren que llevaban en el lugar más de un año.
La Unión de Funerarias denunció que esta no es la primera vez que se detectan irregularidades por parte del crematorio. No obstante, desconocen las razones por las que continúa operando.
“Debemos de decirlo: es la segunda vez que nosotros observamos una situación como esta. Durante la pandemia, en esta misma área, y tal vez en ese mismo crematorio, se encontraron 63 cuerpos en la misma condición. Debemos de tener memoria al respecto, no podemos decir que es inédito, esta es la segunda vez que ocurre”, apuntó Marcelo Ruiz Cantú, presidente de la Unión de Funerarias de Ciudad Juárez.
La Fiscalía General del Estado aseguró que ya se realizan investigaciones para identificar a todas las víctimas y encontrar a los responsables, incluyendo a las autoridades, que actuaron de forma omisa.
Al respecto, César Jauregui Moreno, fiscal General del Estado, señaló que las indagatorias serán lo suficientemente exhaustivas, para primero “darles dignidad a estos cuerpos; segundo, poder identificarlos; tercero, darles el destino que sus familiares así decidan; y deslindar las responsabilidades, tanto de los dueños como de cualquiera que hubiera hecho u omitido alguna acción.
LG