Estados
  • Combate de Flores en León: el antiguo ritual para conseguir pareja que ha dado un giro en la era de Tinder

  • Si bien era una tradición cargada de simbolismos, las personas afirman que ha cambiado y los valores se han perdido.
La referencia más antigua de esta tradición aparece en el programa de festejos del centenario de la consumación de la Independencia. (Foto: Dany Béjar

Cada 16 de septiembre, la Plaza de los Mártires, en pleno centro de León, Guanajuato, se convierte en un espacio donde los besos florecen y el cortejo está a la vista de todos. 

Eso se busca en el famoso Combate de Flores, un tradicional ritual para buscar pareja que cobró fuerza desde los años 60 y que hoy, en la era de Tinder y otras aplicaciones de citas, ha dado un giro total.

Los valores se han perdido, dicen asistentes más longevos

Antes, esta fecha era esperada para intercambiar una flor por un beso, un cortejo que en muchos casos terminaba en una relación. Pero ahora, para los más jóvenes, se trata de un momento de adrenalina donde hay que besar ante la vista de todos.

Don Jesús Conde Vera, de 64 años, y su esposa Hortensia Lara, de 61, asisten cada 16 de septiembre a presenciar el tradicional Combate de Flores, todo por curiosidad. Al paso de los años aseguran que la tradición ya no es como antes.

Ellos son un matrimonio de 47 años. De jóvenes y solteros aseguran que nunca participaron, pero sí acompañaron a sus amigos o familiares a esta tradición donde antes había más respeto.

"Ahorita llegas, te ofrecen una flor y si te parece bien la persona, pues la cambias y se dan su beso. Anteriormente era más seguir a la mujer, era andar detrás de ellas y que se formara una química, y esa es la diferencia de lo de hoy y lo de antes. 
"Cuando se lograba conseguir el beso, ya casi que eran prácticamente una pareja, formalizaban un noviazgo", recordó.
Combate de las Flores
Los adultos dicen que la tradición ha cambiado. (Foto: Dany Béjar)

Y a diferencia de la dinámica de lo que ocurre hoy, dijo que todo cambió.

"Ahorita ya ha evolucionado, se juntan varios muchachos, compran sus flores y se dan sus besos; sin embargo, la tradición es bonita, siempre y cuando sean las cosas limpias, sin malicia, que en estos tiempos es difícil; sumado a ello, el no tener intención de agredir a nadie, pues no se le quita a nadie compartir un beso, es lógico por la tradición".

Su esposa, Hortensia Lara, coincidió en que ya los valores se han perdido y las personas que transitan en el lugar se convierten en testigos de ello, y el momento puede ser incómodo.

"Antes era más respetuoso, ahora es más de vacilar. Era más bonito antes que ahora, si le gustaba la muchacha, se acercaba, intercambiaban la flor y se daban el beso de piquito. ¡Ahora no!, ahora es beso de monaguillo: hasta la campanilla, por eso no me gusta", mencionó.

Resaltó que la juventud ha ido transformando algunas tradiciones y que ya éstas quedan en el olvido, pues parece como borrón y cuenta nueva, siendo algo negativo para ella, ya que en la Plaza Principal de la ciudad también hay niños y que vean eso no es correcto.

"Yo tenía mi grupo de amigas antes, pero no veníamos a recibir flores, veníamos a ver, y los hombres sólo iban detrás de una jovencita, ahora agarran parejo", puntualizó.
Combate de las Flores
Los adultos dicen que ahora hasta los besos han cambiado. (Foto: Dany Béjar)

Por su parte, Juan José Hernández, de 28 años, quien sólo llegó a participar cuando tenía 19, aseguró que esta tradición, que suele ser única en León, ha cambiado mucho.

Él dice que sí participó e incluso llegó a concretar una relación, todo por intercambiar una flor; sin embargo, ahora es algo muy efímero, ya que se cambió el buen sentir por “adrenalina”.

"El hecho de que una mujer ya le regale flores a un hombre es muy interesante, antes el hombre solamente cortejaba, porque actualmente tenemos generaciones muy adelantadas
"Antes era conquistar a la chica y uno se queda con eso, pero actualmente como se vive, es diversidad, es actualizarse y está bien mientras haya respeto", comentó mientras observa ahora a las nuevas generaciones.

¿Cuál es el origen de la tradición?

Para Rodolfo Herrera, director del Archivo Histórico Municipal de León, no hay una fecha exacta de cuándo inició esta tradición, que habría tomado auge en 1963.

"No hay un año en específico de inicio porque no hay datos. Yo creo que es una tradición que nos heredaron de la época de Porfirio Díaz, pero que después de la Revolución Mexicana tomó auge. 
"La gente buscaba la manera de recordar esos combates y de ahí viene el nombre de Combate de Flores, en lugar de hacerlo a través de las balas, de las pistolas y de los enfrentamientos sangrientos, pues la gente le dio otro sentido y ahora dice: 'Vamos a hacer un combate, pero de flores, para celebrar el 16 de septiembre'", dijo.

La referencia más antigua con datos del Archivo Histórico Municipal de León aparece en el programa de festejos del centenario de la consumación de la Independencia, con “combates” los días 25 y 27 de septiembre de 1921, alternándose con las “batallas” de confeti y serpentinas, una variante de juego y cortejo que se realizaba en la ciudad por lo menos desde principios del siglo pasado.

Flores
A partir de 1931, y por más de tres décadas, el Combate de Flores formó parte de las Fiestas de Enero. (Foto: Dany Béjar)

Aunque en aquel entonces, entre 1910 y 1950, los hombres no podían acercarse mucho a las mujeres, ya que debía haber un respeto, por lo que madres y tías cuidaban mucho de ellas, al grado de acompañarlas cuando iban a la Plaza Principal a pasear para cerciorarse de que no hubiera algún acto de rebeldía.

"Así era la manera en la que se buscaban: se regalaban papelitos las parejas porque no podían hablar, y después de la Revolución seguramente buscaron la manera y se empezaron a regalar flores. No de manera continua, pero ya después tomó auge. 
"En aquel tiempo se ponía la banda en el kiosco de la Plaza Principal y la gente daba la vuelta, las mujeres de un lado y los hombres del otro para irse encontrando, irse regalando una sonrisa, una mirada, un guiño, y de esa manera muchas parejas se conocieron en aquella época", explicó.

A partir de 1931, y por más de tres décadas, el Combate de Flores formaría parte de las Fiestas de Enero, alternando con la tradicional kermés, las serenatas y fuegos artificiales en la Plaza Principal —herencias del siglo XIX—, las batallas de confeti, los paseos al parque Hidalgo o la Calzada y el gran baile en Palacio Municipal el día 20.

¿Cómo ha evolucionado el ritual amoroso?

En este día, hombres y mujeres se alistan para un combate sin precedentes, donde cada vez más los participantes son más jóvenes. Escogen su mejor ropa y perfume como armamento, con el fin de conseguir un beso o incluso al amor de su vida. 

Ahora, ya también las mujeres compran flores y hacen este intercambio con los caballeros.

"Hay chicos muy atrevidos que compran un ramo grande, van y lo regalan y piden muchos besos, y también ya hay muchachas que hacen lo mismo: van y le regalan al muchacho que les gusta una flor para que les dé un beso y, de esa manera, nacen algunas parejas que con el tiempo se vuelven novios y seguramente se han casado", comentó Rodolfo Herrera.

Con el paso de los años esta tradición en León se extendió a otras partes de la ciudad como el Parque Hidalgo, El Coecillo y Barrio Arriba, y a pesar de la poca afluencia, esta acción se mantiene.

Festival de las Flores
Los participantes son cada vez más jóvenes. (Foto: Dany Béjar)
"Poco a poco hemos visto con el pasar de los años que ya hay un poquito más de libertad, de más atrevimiento, y se dan los besos en la boca, que antes eran en la mejilla. Lo que más ha cambiado es la vestimenta de la gente. 
"Antes las señoritas iban de vestido con su rebozo, y vemos cómo las muchachas ahora ya no usan vestido, ya usan pantalón y blusa, y eso es lo que más marca la época y el cambio", señaló.

Si bien esta es una tradición que no tiene hora, por las tardes comienzan a reunirse los grupos, pero por las noches el número es mayor.

"Cuando se empieza a oscurecer, cuando las luces se encienden en la ciudad, se empiezan a reunir los jóvenes, tanto en la Plaza Principal y entonces llegan también vendedores de flores.
"Los jóvenes compran un ramo o una flor, buscan a la persona que les gusta, van directamente, le regalan la flor y si son aceptados aquella chica les va a regalar un beso. Es un intercambio de flores por besos, es la tradición", señaló el director del Archivo Histórico Municipal de León.

Google news logo
Síguenos en
Guillermo Esquivel
  • Guillermo Esquivel
  • Licenciado en Comunicación. Cubro la fuente de Negocios. Me interesa tratar de explorar a cada industria por lo que enfrenta en materia económica
Queda prohibida la reproducción total o parcial del contenido de esta página, mismo que es propiedad de MILENIO DIARIO, S.A. DE C.V.; su reproducción no autorizada constituye una infracción y un delito de conformidad con las leyes aplicables.
Queda prohibida la reproducción total o parcial del contenido de esta página, mismo que es propiedad de MILENIO DIARIO, S.A. DE C.V.; su reproducción no autorizada constituye una infracción y un delito de conformidad con las leyes aplicables.