La serie Nadie nos vio partir, protagonizada por Tessa Ía y Emiliano Zurita, bajo la dirección de Lucía Puenzo, se estrena en Netflix el 15 de octubre, inspirada en el libro de Tamara Trottner con hechos reales sobre el rapto que sufrió de su padre por dos años, trama que muestra la violencia vicaria.
“Estoy emocionada y agradecida, es una serie que habla de temas fuertes, con una producción de niveles impecables, me siento honrada por formar parte de este equipo y de compartir esta historia, hice casting, cuando quedé tuve oportunidad de leer el libro y conocí a Tamara y platicar con ella fue enriquecedor para crear el personaje de Valeria”, dijo Tessa Ia durante su paso por su paso en la alfombra roja de la premier de esta serie.
“La serie no está contada forzosamente desde el punto de vista de cuando Tamara era pequeña, sino un poco más adulta. La historia es contada en los años 60 y aunque actualmente ha habido un poco de progreso en cuanto a este tipo de violencia, existe la ley vicaria, pero desafortunadamente sigue sucediendo y mucha gente no sabe que pasa, es muy bueno que existan proyectos que hablen de este tema, sin trabajar de villanizar a los personajes, solo diciendo que son humanos”, agregó.

Emiliano Zurita aplaudió la adaptación e historia.
“Se me hizo una serie que en verdad están apostando por cosas distintas en México, agradezco a Netflix por contar esta historia y hacerlo de forma fidedigna. Mi personaje muy fácilmente lo pueden juzgar como el villano de la historia y para nosotros fue importante que esta historia no fuera de villanos y héroes, sino de personas imperfectas que están buscando hacer lo mejor y tal vez no tienen las herramientas correctas y es muy importante que la gente los entienda”, expresó.
Juan Manuel Bernal le da vida a Samuel, el patriarca de la familia de Leo (Emiliano Zurita), quien se lleva a sus hijos por dos años y los aleja de su esposa, quien lo engañó.
“Es un personaje muy complejo, retorcido, tiene un rencor atorado con tal de restaurar el honor de la familia que fue afectada con las decisiones de otros y él es quien inicia todo. La historia se desarrolla en los años 60 y sigue siendo muy actual, pero ahora tenemos la fortuna de contar con la ley vicaria, esta es una serie orgullosamente mexicana”, contó.
Para Bernal la enseñanza en esta historia es que los seres humanos guardan muchas cosas, cuestionarse qué está bien y mal.
“Hoy celebramos la premier de esta serie y el mundo está de cabeza, me quedo con una reflexión, ¿dónde están los niños del mundo? los adultos somos responsables de los niños y son los que tenemos que cuidar porque son el futuro de la humanidad y esta serie, también habla de eso”, compartió.

Flavio Medina es el otro patriarca, Moishe es padre de Valeria y hace todo para que su hija recupere a sus hijos, es un hombre moderno para esa época, sensible y cálido, que para los espectadores será muy interesante entender el tema y verse retratados en algunos de los personajes.
“Hace todo para defender a su hija, sin importarle le hipocresía de la sociedad y la época, llegó viajando en un barco sin nada, era migrante y la fortuna de que se base es una historia real es que construyes al personaje desde otro punto, además de que pudimos platicar con Tamara quien es la escritora”, describió.
Medina expresó que este trabajo le ha dejado una gran satisfacción no solo porque lo vivió sino por poder representar a un personaje de una historia real y cruda.
“La historia toca temas que nos duelen, que rompieron el alma de una mujer, de un esposo, de dos niños, temas que ahora por suerte existe la ley vicaria”, aseguró.
La historia cuenta en cinco capítulos el rompimiento de dos familias que decidieron hacer el pacto de estar unidas para siempre, los dos patriarcas casan a sus hijos sin preguntarles si así lo querían, pero el verdadero amor destruye los planes. Tamara Trottner cuenta su propia historia.
“Está inspirado en mi vida y surge cuando me doy cuenta que tengo la necesidad de contar esta historia, son mis memorias de cuando tenía cinco años y mi papá nos secuestró a mi hermano y a mí para vengarse de mi mamá, estuvimos dos años en tres continentes. Me reencontré con mi papá, que dejé de ver cuando tenía siete años y le pregunté cómo se había atrevido a alejarnos y me contó su verdad, que era tan valiosa y verdadera como la de mi mamá y decidí escribir una novela que expusiera los sucesos y que la gente decidiera”, puntualizó Trottner.
Claves
La serie se grabó en seis meses y tuvo locaciones en Ciudad de México, Sudáfrica, Italia y París.
La violencia vicaria es usar a los hijos para controlar o hacer sufrir a la madre.
OAGP