Hace un par de semanas comenzó el juicio contra Harvey Weinstein, otrora productor de Hollywood que, tras ser denunciado por violación y agresión sexual en 2017, dio nacimiento del movimiento #MeToo.
Este martes, el proceso legal convocó al banquillo a la primera de las tres presuntas víctimas, quien relató su perturbadora historia con el productor de películas como Sexo, mentiras y video, Pulp Fiction o Shakespeare apasionado.
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Miriam Haley, quien laboró como asistente de producción, se sometió al interrogatorio de la fiscal Nicole Blumberg. Así, contó ante el jurado del Tribunal Penal de Manhattan que un día Weinstein le pedía un masaje y otro se mostraba encantador o fuertemente insistente en sus exigencias.
La mujer, que ahora tiene 48 años, conoció al entonces jefe de los estudios Miramax en un preestreno en Londres y luego concertó una cita con él durante el Festival de Cannes, en la primavera de 2006.
"Estaba emocionada por la oportunidad de conocerle...quería ver si había algún trabajo para mí", explicó la víctima.
Aunque la emoción pronto se convirtió en desilusionó cuando, en una habitación del hotel Majestic Weinstein, entonces uno de los hombres más poderosos de Holywood, le pidió un masaje.
En su testimonio, la acusadora dijo que se negó y la cita fue corta. "Me sentí humillada", dijo.
Mientras por las pantallas de la sala se deslizaban las páginas de su diario de la época, Haley explicó que había visto a Weinstein en otras ocasiones y que le había parecido "encantador", aunque en una ocasión insistió mucho en que le acompañara en un viaje a París, antes del episodio en que se centran las acusaciones.
Haley habló con calma, sin buscar los ojos del acusado, quien a sus 73 años se moviliza en silla de rueda mermado por problemas de salud y luce pálido y calvo.
El productor acusado escuchó el testimonio casi impasible, con un brazo apoyado en el respaldo de su silla.
La jornada terminó antes de abordar lo acontecido el día de julio de 2006 en que Weinstein, supuestamente la obligó a mantener relaciones sexuales en su piso del lujoso barrio neoyorquino del Soho. La audiencia de testimonio continuará el miércoles.
La segunda vez que cuenta su historia
Resalta que esta ocasión es la segunda vez que Haley acude a dar su versión de los hechos, tras un primer juicio en 2020, al término del cual Harvey Weinstein fue condenado a 23 años de cárcel.
Pero el año pasado, el Tribunal de Apelaciones de Nueva York anuló el juicio por motivos procesales, una vuelta a la casilla de salida que fue vista como una bofetada al movimiento impulsado contra la violencia sexual.
"Es un gran sacrificio para ella (...) tener que revivir lo que ocurrió hace tantos años (...) lo hace por una razón, la justicia", señaló tras la audiencia la abogada de Haley, Gloria Allred.
hc
