La Fiscalía General del Estado (FGE) nuevamente incumplió en los plazos de entrega de resultados a la señora María Teresa N. madre de Dulce Alejandra N., joven irapuatense cuyo cuerpo tuvo que ser exhumado debido a una supuesta confusión, pues se presume mezclaron sus restos con los de otras víctimas.
“Juegan con mis sentimientos”, señaló la madre de Dulce, quien solo busca certeza de que efectivamente correspondía a su hija el cuerpo a quien le lloró en el panteón todo este tiempo.
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Ante un primer retraso de más de un mes en la entrega de resultados de los exámenes de ADN practicados, y por ende, de entrega de los restos pactados para el 15 de octubre, a la señora María Teresa le prometieron que este 10 de noviembre finalmente le darían contestación, pero eso no sucedió, y los agentes de la Fiscalía que llevan el caso no han contestado a sus reiterados mensajes pidiendo certeza.
El día lunes, el agente de la Fiscalía le envió un audio por la mañana, indicándole que “ya tenían una contestación del perito” y quedó de comunicarse vía telefónica con ella más tarde, lo cual no sucedió.
El martes, la señora María Teresa nuevamente envió un mensaje al elemento de la Fiscalía General del Estado, señalando que se encontraba en suspenso y muy nerviosa por conocer los resultados de las pruebas de ADN practicadas al cuerpo de su hija.
No obstante, nuevamente no tuvo respuesta. Ayer por la mañana, la señora María Teresa nuevamente volvió a comunicarse con la FGE, sin que hasta el momento exista alguna noticia.
A cinco años de haber sido enterrada, el cuerpo de Dulce Alejandra N. fue exhumado por la Fiscalía el pasado 15 de julio por supuestos errores en la entrega de los restos. Su caso es uno de al menos seis detectados en los últimos cinco años en Guanajuato, donde familias de víctimas han recibido restos incorrectamente de otras personas diferentes de sus familiares.
