La explosión de una pipa de gas ocurrida el pasado 10 de septiembre en el puente de la Concordia, en Iztapalapa, continúa dejando secuelas dolorosas. Entre los afectados se encuentran dos personas originarias de Guanajuato quienes sufrieron severas quemaduras.
De acuerdo con un comunicado oficial el Gobierno del Estado de Guanajuato, se trata de Yanet Guadalupe, de 22 años, y su pequeño hijo Uriel, de 2 años, ambos oriundos de Dolores Hidalgo pero residentes de la capital del país.

La joven presenta quemaduras en más del 60 por ciento de la superficie corporal, mientras que el menor registra lesiones en aproximadamente el 30 por ciento de su cuerpo.
Los dos permanecen hospitalizados en el Instituto Nacional de Rehabilitación (INR), donde reciben atención especializada y se reportan en estado delicado.
El estallido se registró cuando un vehículo que transportaba gas LP se accidentó sobre el puente vehicular Concordia, una zona de alta circulación en Iztapalapa.

Las llamas y la onda expansiva alcanzaron a peatones y automovilistas que se encontraban en el lugar, provocando escenas de pánico y movilizando de inmediato a los cuerpos de emergencia.
El Gobierno de Guanajuato informó que mantiene comunicación con las familias de las víctimas para garantizar acompañamiento en los procesos que resulten necesarios.