Ante 40 mil personas y con 155 años de historia, San Pedro Tlaquepaque volvió a vestirse de fiesta para conmemorar el tradicional Grito de Independencia en la explanada de la presidencia municipal, una celebración que desde 1870 mantiene vivo el espíritu patrio en este Pueblo Mágico.
El escenario se levantó junto al emblemático Parián, que lució lleno tras la reciente reapertura del corredor afectado por el derrumbe de una parte de los arcos. El espacio, ahora remodelado, fue el marco ideal para una noche que combinó tradición, música y alegría, con la promesa de que en diciembre toda la restauración estará concluida.
Primer grito de Laura Imelda Pérez como presidenta
Familias enteras se dieron cita para corear la arenga encabezada por la presidenta municipal, Laura Imelda Pérez Segura, quien desde el balcón del palacio municipal, acompañada por su hijo, hizo vibrar a la multitud.
El espectáculo musical estuvo a cargo de la Banda San Miguel y de Lupillo Rivera como artista estelar, mientras que el cielo se iluminó con un colorido show de fuegos artificiales.
Los asistentes quedaron maravillados como cada año con el trato recibido por los tlaquepaquenses.
"Muy bonito, me gustaron los cohetes la banda, todo bien mexicano fuimos a cenar enchiladas platillos mexicanos"; "muy familiar, la música, la comida hay gente muy cálida aquí"; "ya había venido aquí a celebrar, si todos los años vengo con mi hijo, qué tal le pareció esta edición, pues si siempre aquí en Tlaquepaque es muy familiar por eso venimos", dijeron Samantha, Jessica y Zaida, asistentes al evento.
Para muchos, la tradición de celebrar en Tlaquepaque se ha convertido en una cita obligada, donde la calidez de la gente, la comida típica y la música fortalecen el orgullo de pertenecer a un pueblo que honra sus raíces con alegría y unión.
OV