La Secretaría de Salud de Hidalgo pidió a la población reforzar las medidas preventivas ante la presencia de brotes de la enfermedad de manos, pies y boca, causada por el virus Coxsackie, en al menos 12 municipios del estado. Aunque las autoridades sanitarias aclararon que no se trata de una situación de alarma, sí exhortaron a padres, madres y personal escolar a extremar precauciones para evitar la propagación del virus, especialmente entre la población infantil.
La enfermedad, de origen viral, provoca fiebre, dolor de garganta y una erupción con llagas o ampollas en manos, pies y boca. Es altamente contagiosa en entornos como guarderías y escuelas, donde los niños comparten espacios, juguetes y alimentos.
Recientemente, personal de epidemiología visitó dos instituciones educativas en la capital hidalguense tras detectar tres casos en cada una. Durante las visitas de verificación, las autoridades constataron que los pacientes se encuentran aislados y bajo tratamiento médico, y compartieron recomendaciones para contener posibles contagios.
Brotes activos por municipio
Hasta el 28 de octubre, la dependencia reporta 32 brotes activos con un total de 144 casos distribuidos en los siguientes municipios: Actopan (2), Cuautepec (2), Eloxochitlán (2), Huejutla (2), Jacala (12), La Misión (5), Mineral de la Reforma (23), Pachuca (20), Tizayuca (20), Tlahuelilpan (2), Tlahuiltepa (5) y Tolcayuca (11). El municipio con mayor número de casos es Tula, con 38.
La Secretaría de Salud señaló que estas cifras pueden variar conforme las unidades médicas emitan nuevas notificaciones, por lo que los datos se actualizan de manera continua durante la vigilancia epidemiológica.
De enero a octubre de 2025, se han registrado 464 casos en todo el estado. En el mismo periodo del año anterior, se reportaron 540, lo que representa una disminución del 14 por ciento.
“Este comportamiento epidemiológico confirma que no existe incremento ni situación de alarma, y que las acciones preventivas y la notificación oportuna han permitido mantener un control adecuado de la enfermedad”, indicó la dependencia.
Ante este panorama, la Secretaría de Salud solicitó la colaboración de madres, padres de familia y personal educativo para fortalecer las acciones preventivas. Entre las recomendaciones destacan: acudir a valoración médica y no automedicarse; lavar las manos frecuentemente con agua y jabón; evitar compartir utensilios o alimentos; mantener limpios los espacios escolares y del hogar; y no enviar a niñas o niños enfermos a la escuela hasta que el médico lo indique.
“Estas medidas son esenciales para cortar cadenas de transmisión y proteger la salud de la comunidad escolar”, señaló la institución.
La vigilancia epidemiológica continuará hasta que se extienda el alta sanitaria de todos los casos activos. Mientras tanto, las autoridades mantienen un monitoreo constante en escuelas y centros de salud, con el objetivo de detectar oportunamente nuevos brotes y actuar de forma inmediata.
Aunque el virus Coxsackie suele presentar síntomas leves y desaparece por sí solo en pocos días, su rápida transmisión entre menores de cinco años exige una respuesta coordinada entre familias, escuelas y el sistema de salud. En Hidalgo, esa respuesta ya está en marcha: no con alarmas, sino con prevención, información y cuidado cotidiano.