En medio de la discusión de la Ley General de Agua en el Senado, Francisco Ramírez Acuña y Miguel Márquez Márquez, ex gobernadores de Jalisco y Guanajuato, respectivamente, reconocieron que cuentan con concesiones desde hace varios años.
En entrevista, los legisladores de Acción Nacional afirmaron que sus concesiones son legales.
Ramírez Acuña explicó que su concesión se le otorgó en los términos de ley, cuando no era funcionario público.
“Me señalan 25 mil metros cúbicos, yo tengo una superficie de 27 hectáreas y para poder regar esa superficie necesitaría cuando menos 260 para poderle dar agua a la producción de limones.
“Producimos limones en Tototlán. Es una producción anual más o menos de 300 toneladas y es lo que la propia disposición en la ley anterior y en la Comisión Nacional del Agua disponía para efecto de poder regar esto”, expuso.
Agua es para riego agrícola, afirman
Y destacó: “Puedo decirle a todos los que nos ven y nos escuchan que tenemos totalmente la conciencia tranquila, es agua que sirve para poder producir alimentos, como es el caso de limón, y poner en la mesa de los mexicanos limón de buena calidad, una parte se exporta y otras otra parte se queda aquí al consumo nacional”.
Señaló que si hubiera o encuentran alguna irregularidad, “que me la cancelen. Yo no tengo ningún problema. Así que no hay ningún acaparamiento de agua, no hay ningún acaparamiento de acciones en las que pudiéramos tener algo que ocultar, estamos en la mejor disposición de que la autoridad nos revise, o sea, estamos dando la cara”.
Por otra parte, el senador Miguel Márquez también admitió que cuenta con concesiones, “con la frente en alto, con la tranquilidad en mi conciencia y, sobre todo, con el apego a la normatividad”.
Concesiones fueron heredadas, dice Miguel Márquez
Explicó que cuenta con dos concesiones, una de ellas heredada por su padre, la cual tiene más de 50 años.
“Mi padre, obviamente poco antes de morir, dice: 'Miguel, tú te encargas de esta concesión para con tus siete hermanos'. Sin ningún problema. Nada del otro mundo, una concesión que es de 150 mil metros cúbicos y que es para, literalmente, 30 hectáreas, o sea, somos pequeña, mediana propiedad, si ustedes lo quieren ver así”.
La otra concesión, mencionó, tiene cerca de 50 años, sin ningún problema, siempre al día.
“La otra concesión, que tiene cerca de 15 hectáreas, es para un pozo en un terreno también heredado por parte de mi madre, en un rancho que ya es de tres generaciones y en las mismas circunstancias. Está totalmente en regla, ese es para 15 hectáreas, o sea, lo que tiene un ejidatario, lo que tiene cualquier gente de pequeña propiedad, no somos en ningún momento aquellos acaparadores”.
Añadió que el agua es para uso de riego agrícola, “no hay ninguna desviación, de ninguna especie y me atrevo a decir que si mañana quieren ir a revisar, que vayan, y el día que quieran caer de sorpresa, a la hora que gusten; el que nada debe nada teme”.
Ambos senadores insistieron que no hay nada qué esconder, “ahí están las concesiones en regla, al día, como debe ser… Entonces, el tema del agua, yo insisto, es inodora, incolora, insabora. No le metamos ruido ni carroña política”.
EHR
