A la fecha se han incumplido los dos principales objetivos de la última reforma electoral, porque no han bajado los costos de las elecciones ni han salido los gobiernos de los procesos, indicó el ex consejero nacional Javier Santiago.
Durante la conferencia "INE-OPLES, una relación compleja" señaló que sacar a los gobernadores de las elecciones es como sacar al diablo del infierno.
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Lo que sí se puede hacer es evitar a toda costa que se desvíen recursos y se favorezca a un partido o candidato.
Económicamente el costo de los procesos no ha bajado. Incluso se ha incrementado con tanta regulación del INE, dijo en la Facultad de Ciencias Políticas de la UAEM.
Ante estudiantes advirtió que el PRI ha cambiado. Si antes sabía perder, ahora parece quererse perpetuar en el poder a toda costa, lo cual es muy riesgoso por la gran molestia social que existe y claramente indica que "el horno no está para bollos" y si "le soplan al anafre el fuego se enciende".
LC
