El gobierno de Estados Unidos concretó la extradición de tres guatemaltecos acusados de haber participado en la tragedia migrante ocurrida el 9 de diciembre de 2021 en Chiapa de Corzo, Chiapas, cuando un tráiler repleto con más de doscientas personas volcó y provocó la muerte de 56 de ellas, además de dejar 113 heridos.
La Fiscal General de Estados Unidos, Pamela Bondi, anunció que los acusados enfrentarán cargos en cortes federales estadunidenses por su responsabilidad en lo que calificó como un “evento masivo de contrabando de migrantes que terminó en tragedia” y subrayó que las acusaciones forman parte de la estrategia de la Fuerza de Tarea Conjunta Alpha, creada para combatir a las redes internacionales de tráfico de personas.
“Logramos la extradición de tres hombres de Guatemala acusados en relación con un incidente de tráfico de personas con múltiples víctimas. Este trágico suceso ocurrió en 2021 en Chiapas, México. Un camión semirremolque con al menos 160 inmigrantes indocumentados se estrelló, causando la muerte de más de 50 personas. El costo del tráfico de personas es enorme. Mueren muchas familias. Mueren muchas personas”, detalló durante su mensaje en Tampa, Florida.
La detención se originó en Guatemala en diciembre pasado, donde la Policía Nacional Civil informó de la captura de cuatro personas ligadas al accidente, de los cuales la mayoría ya fueron trasladados a Estados Unidos para enfrentar proceso judicial.
Las investigaciones apuntaron desde un inicio a estructuras de coyotaje en Guatemala que operaban junto con contactos en México y Centroamérica. La captura de los cuatro sospechosos en territorio guatemalteco confirmó esa hipótesis y, con la extradición de tres de ellos, Estados Unidos asume el procesamiento judicial de los responsables.
El caso de Chiapas también puso en evidencia el papel de los coyotes en el flujo migratorio, por lo que Bondi destacó que hace unas semanas condenaron en Texas a un coyote que cobraba 30 mil dólares por cada grupo de 10 migrantes que lograba cruzar el Río Bravo, y una suma adicional de 30 mil dólares si lograban llegar vivos a Estados Unidos.
Pamela Bondi aseguró que el gobierno de Estados Unidos no limitará su actuación a la frontera sur. “Si trafican con seres humanos, serán encontrados, procesados y llevados ante la justicia”, advirtió, al tiempo que adelantó que la Fuerza de Tarea Conjunta Alpha expandirá su trabajo hacia la frontera norte con Canadá y a los puertos marítimos, integrando a la DEA, la ATF y el FBI.
“No importa dónde estén ni dónde empiece o termine nuestra frontera. Eso no limita nuestras capacidades de hacer cumplir la ley, de traerlos a Estados Unidos, procesarlos y encerrarlos por el mayor tiempo posible”, aseguró la fiscal general.
Bondi también lanzó un mensaje directo a quienes contemplan pagar a “coyotes” para ser introducidos de manera ilegal a Estados Unidos: “No es seguro para ustedes ni para sus familias. Estos coyotes están coordinando con organizaciones terroristas y recibiendo dinero de ellas para introducir familias y menores a nuestro país, y estas operaciones están costando vidas”.
En su discurso destacó que las redes de tráfico de personas no actúan de forma aislada, sino que mantienen vínculos con grupos criminales de mayor alcance. La funcionaria subrayó que esas estructuras representan una amenaza directa a la seguridad nacional y al mismo tiempo convierten a los migrantes en víctimas de explotación y violencia durante su tránsito.
SNGZ