Ya pasó más de un mes del homicidio del presidente municipal de Pisaflores, Miguel Bahena Solórzano y la vida política del ayuntamiento permanece paralizada, aunque sin afectar la administración pública, han asegurado las autoridades estatales. El crimen, ocurrido el 20 de octubre de 2025, detonó un conflicto interno que ha impedido que el suplente legal asuma el cargo; además mantiene a la población en un escenario de incertidumbre institucional, reclamos sociales y tensiones acumuladas en una zona ya afectada por la marginación y recientes desastres naturales ocurridos justo a unos días del crimen del munícipe.
La noche del 20 de octubre, el edil fue atacado frente a su domicilio en la comunidad de La Estancia. De acuerdo con reportes policiales, dos personas a bordo de una motocicleta le dispararon en al menos cinco ocasiones. El asesinato ocurrió en una región marcada por la pobreza, las dificultades de comunicación y la vulnerabilidad social, lo que amplificó el impacto del hecho entre los habitantes del municipio que se volcaron al día siguiente al funeral del presidente municipal para darle el último adiós.
El Partido Verde, al que pertenecía Bahena, condenó el crimen como un “ataque directo” y exigió una investigación inmediata, exhaustiva y transparente que permitiera identificar a los agresores. “Quien arrebata la vida a una autoridad debe enfrentar la ley sin pretextos ni privilegios”, afirmó Avelino Tovar, entonces dirigente estatal del PVEM.
La contundencia del señalamiento contrastó con el escenario que se desarrolló posteriormente dentro del ayuntamiento, donde la disputa por la sucesión complicó aún más la estabilidad municipal.
La Fiscalía de Hidalgo abrió las investigaciones y realizó varias detenciones. El entonces director del DIF municipal, Johny René “N”, fue aprehendido y señalado como presunto autor intelectual. Otras dos personas fueron presentadas ante un juez, una identificada como probable autor material. La Fiscalía informó que el exdirector del DIF fue detenido con un arma de fuego y que existía en su contra una orden de aprehensión por delitos contra la salud, elementos que reforzaron la hipótesis de un caso con posibles vínculos entre conflictos personales, actividades delictivas y operación del gobierno municipal.
Negativa de cabildo
A partir del homicidio, correspondía al suplente legal, Silvestre García Márquez, asumir la presidencia municipal. Sin embargo, el cabildo rechazó en dos ocasiones tomarle protesta. La negativa se sostiene en que su hermana, identificada como Hannia o Hannie, presuntamente habría estado implicada en el crimen, hecho que no ha sido rechazado pero tampoco afirmado por la autoridad “por el sigilo que requiere una investigación”, aseguró tras la pregunta expresa el procurador del estado. Estas circunstancias generaron un rechazo abierto entre algunos integrantes del cabildo, quienes consideraron inviable su llegada.
Ante la imposibilidad de concretar la sucesión, el secretario general municipal, Antonio Robles, fue nombrado encargado temporal del despacho. Aunque la administración opera bajo su coordinación, la falta de una autoridad titular ha generado preocupación en la población, que teme que la ausencia de liderazgo formal agrave la inseguridad, reduzca la eficiencia de los servicios y prolongue la crisis.
La reacción social ha sido visible. Habitantes de Pisaflores han salido a las calles para exigir justicia y solicitar claridad en las investigaciones. Algunos grupos han expresado su rechazo a que, según sus palabras, “alguien vinculado con los asesinos” ocupe la presidencia municipal. La Asociación de Alcaldes de Hidalgo presidida por Eduardo Medécigo presidente municipal de Mineral de la Reforma, condenó el crimen y llamó a reforzar la seguridad para proteger a las autoridades locales, en tanto que el gobernador Julio Menchaca reconoció que la violencia política representa un riesgo para la gobernabilidad en regiones vulnerables.
El futuro institucional del municipio permanece abierto. Si la Fiscalía consolida pruebas suficientes, podría establecer una red de responsabilidades más amplia, lo que permitiría disminuir el clima de duda que pesa sobre la administración municipal. Pero mientras el cabildo mantenga su rechazo al suplente y no exista una alternativa clara, Pisaflores podría continuar funcionando con autoridades interinas, en un escenario que pone presión sobre la operatividad cotidiana y la confianza pública.
