El Tribunal de Justicia Administrativa del Estado de México ha logrado un desarrollo en el ámbito humano, digital y de impartición de justicia, pilares con los que se busca recuperar la confianza de la ciudadanía, afirmó el magistrado presidente del TRIJAEM, Gerardo Becker Ania.
En entrevista con MILENIO, destacó que uno de los objetivos de su administración es regresar a los orígenes del servicio público para acercarse a la gente basada en la inteligencia emocional de sus funcionarios.

“Hemos querido cambiar la dinámica, no solamente del servicio público, sino la impartición de justicia con tres grandes pilares. El primero, el pilar humano. En ese pilar humano nos enfocamos directamente en las y los servidores públicos y nos interesa su capacitación, la capacitación profesional y su capacitación de desarrollo humano sobre inteligencia emocional”.
“El segundo pilar es el digital. Queremos un mundo y un tribunal muchísimo más avanzado y tecnológicamente evolucionado, hemos dado muchísimos brincos a comparación de años anteriores. Y el tercer pilar, el pilar de la impartición de justicia, que es la actividad sustancial del tribunal, que gracias a toda la combinación de todos esos factores han dado un excelente resultado a favor de la ciudadanía mexiquense”.
—Toca un tema clave; la inteligencia emocional. Pocas dependencias o incluso empresas ponen atención en ello, ¿cuál es la importancia? —
“A mí me gusta romper paradigmas, me gusta romper techos, cambiar las estructuras de las instituciones para un mejor servicio público. Yo le digo, ‘Un servicio público con inteligencia emocional’, creo que tenemos que formar a nuestras servidoras y servidores públicos para que conozcan sus emociones, tengan un desarrollo humano de forma correcta y de así puedan atender a la ciudadanía, porque el servicio público, de eso se trata, de servir”.
“Creo que la gente en general y las instituciones públicas creen que el servicio público y la política mexicana está desatendiendo el tema humano, hay que regresar a los orígenes del servicio público, regresar a los a que la gente confíe en nosotros y yo lo que estoy tratando de hacer en el Tribunal de Justicia Administrativa del Estado de México es generar nuevamente que la ciudadanía tenga confianza con las instituciones”.
—¿Es romper un poco el estigma de funcionarios siempre malencarados, que atiende mal a las personas? —
“Es la clásica frase de la burocracia, se nos entiende que los burócratas somos personas que no estamos atendiendo a la ciudadanía, que atrasamos los procesos, que somos perezosos, que somos distantes a ellos, de sus necesidades y es un poco de romper este paradigma. El año pasado tuvimos un incremento del 500% en las capacitaciones, un 500%, no es un número nada despreciable, no es un 10%, un 20, 50, es un 500%, es decir, más de 130 y tantas horas de capacitación a más de 300 servidores y servidoras públicas del tribunal para estar formando mejores servidores públicos”.
“Y mucha gente pensará, —¿Y esto de qué sirve?—, se le preguntó: " Bueno, si la gente tiene mejor capacidad de solución ante los problemas, una de una manera más crítica, de una manera más constructiva, de una estabilidad emocional, va a ser su trabajo de mejor forma y hacer el trabajo de mejor forma se traduce en buenos resultados”.
—¿Cuáles serían estos resultados? —
“Ya los vimos y los estamos viendo, por ejemplo, el tema de del pilar humano hemos incrementado, como te lo había comentado, más del 500% en las capacitaciones; en el pilar digital crecimos un 136%, ahora tenemos 36 plataformas nuevas, que eso es un hecho histórico en el tribunal”.
“Estamos evolucionando, además estamos ahora haciendo los trámites y la investigación que tenemos que realizar para la implementación de la inteligencia artificial en los procesos de la imputación de justicia y en el tema de la impartición de justicia, la actividad esencial, pues los números en las emisiones de sentencia han crecido muchísimo más en relación con años anteriores y esto ha sido en combinación de que tenemos mejores plataformas digitales que han ayudado a que el trabajo de las y los impartidores de justicia sea más eficiente”.
RM