Este martes familiares y amigos de la señora Patricia Marrón, víctima de la explosión de un polvorín clandestino en Chimalhuacán, recibieron el cuerpo de la mujer de 52 años para despedirla.
Flores blancas y rosas rojas acompañan el ataúd café en el que llegaron los restos de la matriarca de la familia Hidalgo, quien desde hace varios años se sustentaba de la elaboración de pirotecnia en esta localidad ubicada en la zona oriente del Estado de México.
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“Estamos consternados porque en un abrir y cerrar de ojos se nos dieron tres seres queridos, que nunca se metieron con nadie y siempre fueron respetuosos y este dolor que nos dejan no sabemos si lo vamos a poder superar”, aseguró Guadalupe hermana de la víctima.
Frente a un domicilio de la calle Insurgentes de la colonia San Pedro, a poco más de un kilómetro de la vivienda donde ocurrió la explosión ubicada en el Barrio San Pablo parte alta, se dieron cita vecinos, amigos y familiares para dar el último adiós a la mujer que será sepultada el miércoles 22 de enero.
“Desgraciadamente ya estamos por darle el último adiós a mi hermana, madre de los dos jóvenes que fallecieron primero, todavía teníamos la esperanza de qué ella saliera adelante, que luchar por su vida pero Dios no lo quiso así, Dios se la quiso llevar y nosotros aquí estamos con un dolor más,
“Es una pérdida muy grande porque Dios nos dio como una bomba que nos quitó a tres al mismo tiempo entonces como familia estamos confundidos ya no sabemos si llorar”, agregó Carmen otra de las hermanas de la víctima.
"En un abrir y cerrar de ojos se nos fueron tres seres queridos”, velan a la señora Patricia, víctima de explosión en Chimalhuacán@Zulgar18 https://t.co/hCnAGgMrZI pic.twitter.com/oTdAS2R3Jp
— Milenio Estado de México (@milenio_edomex) January 22, 2025
Su familia recuerda a Patricia Morrón como una mujer dedicada a su trabajo, que amaba la labor de la pirotecnia y que siempre cuidó el bienestar de su familia, pues aseguran que su taller si estaba ubicado en una zona regulada para el manejo de pólvora en “El Chocolín”.
“Amaban mucho su trabajo, pero como tal, esos chismes se puede decir que se están haciendo no existen porque mi sobrino y mi hermana tenían sus talleres en El Chocolín, desgraciadamente puede que había pólvora como dicen, por qué ellos iban a entregar mercancía”, dijo Guadalupe.
La señora Patricia será sepultada junto a sus hijos Jonatan de 20 años y Brayan de 29 quienes también fallecieron en la explosión de la semana pasada.
kr
