En México, el negocio de las drogas ya no es el único pilar económico del crimen organizado. En silencio, y lejos del foco mediático que suelen atraer los decomisos de drogas o las capturas de capos, los cárteles han expandido su dominio hacia actividades igual de lucrativas, pero menos visibles.
Estas operaciones paralelas no solo generan millones de pesos al año, sino que también refuerzan el poder territorial de los grupos criminales, afectan a millones de habitantes e incrementan la violencia en el país. En MILENIO te explicamos de cuáles se trata.
Los negocios poco conocidos de los cárteles de drogas
Además de la producción y el tráfico de marihuana, heroína, cocaína, metanfetamina y el fentanilo, organizaciones criminales como el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), el Cártel de Sinaloa, el Cártel del Golfo (CDG) y otras están involucradas en actividades como:
- Extorsión
- Robo de minerales
- Tráfico de armas
- Prostitución
- Cobro de piso
- Lavado de dinero
No obstante, en los últimos años el gobierno de Estados Unidos ha destacado que también participan en actividades menos notorias.
Por ejemplo, la mañana del 1 de mayo del 2025, la Red de Control de Delitos Financieros (FinCEN, por sus siglas en inglés) del Departamento del Tesoro emitió una alerta por un sistema ilegal de distribución de combustible dirigido por cárteles mexicanos.
Según se informó, el robo de combustible y el contrabando de petróleo se han convertido en la fuente ilícita de ingresos más importante de los cárteles.

De acuerdo con el esquema, los grupos criminales roban combustible y crudo a la Petróleos Mexicanos (Pemex) mediante diversos métodos, como soborno a empleados, perforación ilegal de ductos o robo directo en refinerías.
A través de empresas bajo su control, el crudo es posteriormente contrabandeado en camiones cisterna a través de la frontera hacia Texas, muchas veces etiquetado falsamente como "aceite residual" y otros materiales peligrosos para evitar inspecciones, impuestos y regulaciones.
Finalmente, el crudo robado es vendido a otras empresas petroleras, ya sea de gas natural o refinerías, en Estados Unidos y el extranjero.
El tráfico de migrantes, otro negocio del narco
Los cárteles ahora administran el paso de migrantes por los territorios que controlan. Cobran cuotas por cruzar ciertas rutas y, en muchos casos, no permiten el paso de las personas.
El antiguo modelo de “coyote” o “pollero” individual ha sido absorbido en muchas regiones por estructuras delictivas más grandes que forman parte o trabajan para cárteles como el CDG, el CJNG o Los Chapitos, del Cártel de Sinaloa.
Este control criminal no solo ha encarecido el costo por cruzar ilegalmente a Estados Unidos, sino que ha convertido el tránsito migrante en una ruta plagada de violencia, amenazas y explotación.
Quienes no pagan la cuota son secuestrados, agredidos o forzados a trabajar para los propios grupos criminales. Las mujeres, en particular, enfrentan un riesgo elevado de abuso sexual, trata o desaparición.

La tala ilegal de árboles y cómo se relaciona con el narcotráfico
La tala ilegal de árboles se ha convertido en una de las actividades paralelas más lucrativas para los cárteles de drogas.
Usualmente, las estructuras delictivas buscan dominar regiones rurales para facilitar otras actividades, como la instalación de laboratorios ilícitos, cultivos o crear rutas de trasiego.
En la región de la Meseta Purépecha, en Michoacán, cárteles como Los Viagras y el CJNG han desplazado comunidades para talar y sembrar aguacate o controlar la madera.
En Chiapas y Oaxaca, grupos criminales operan en las zonas indígenas, aprovechando las escasa presencia del gobierno federal.
La tala ilegal trae consigo consecuencias ambientales y sociales, como deforestación, pérdida de biodiversidad, erosión de suelo, violencia, desplazamiento forzado y asesinatos de defensores del medio ambiente.

Cobro de impuestos en puertos y pasos fronterizos: ¿cómo opera el narco?
Junto a la reciente alerta financiera del FinCEN, el Departamento del Tesoro anunció sanciones contra tres mexicanos vinculados con el CJNG. El grupo es liderado por César Morfín Morfín, a quien señalan de haber reorientado su actividad criminal hacia el robo de combustible.
En el reporte, las autoridades estadunidenses refieren que, dado su control sobre los puentes fronterizos entre Tamaulipas y Texas, 'Primito' y su red también cobran tarifas a los camiones que transportan crudo a Estados Unidos.
Un dato similar fue publicado a través de la Evaluación Nacional de la Amenaza de las Drogas 2024 de la Administración de Control de Drogas (DEA). Acorde con dicho informe, el 'cártel de las cuatro letras' obtiene ingresos a través del cobro de piso en puertos marítimos.
"Ejercer control sobre los puertos marítimos también es una fuente clave de ingresos para el CJNG, al cobrar piso a otras organizaciones por usar los puertos para sus propios envíos de drogas o sustancias químicas. Tiene acceso corrupto casi exclusivo a los puertos de Manzanillo y Lázaro Cárdenas en la costa del Pacífico de México, y también puede acceder a los puertos de Veracruz y Matamoros en el Golfo de México".
El tráfico de animales: otro negocio del narco
El tráfico ilegal de animales es una de las actividades menos visibles pero crecientes de cárteles de drogas.
Aunque históricamente ha sido dominado por redes especializadas, en los últimos años ciertos grupos han comenzado a involucrarse directa o indirectamente en esta actividad, ya sea para obtener ganancias, blanquear dinero o traficar junto con otros productos ilícitos —como armas y drogas—.
En la Evaluación Nacional de la Amenaza de las Drogas 2024, la DEA reveló que el Cártel de Sinaloa aprovechaba sus vínculos con proveedores de precursores químicos de China para un segundo negocio: el tráfico de totoaba.
La totoaba es un pez que habita en el Golfo de California que actualmente se encuentra en peligro de extinción. Su vejiga natatoria se considera un manjar afrodisíaco y medicinal en la medicina tradicional china, por lo que es pescado ilegalmente y traficado.
La pesca ilegal de este animal ha llevado al borde de la extinción a otra especie: la vaquita marina, que muere atrapada en redes destinadas a capturar la totoaba.
RMV.