La ubicación geográfica de aquellas entidades que comparten frontera con Estados Unidos las condenó a ser territorios de constante disputa para organizaciones delictivas que buscan controlar, entre múltiples economías criminales, el tráfico de drogas y de migrantes.
Chihuahua no ha sido la excepción y, pese a que en décadas atrás fue el Cártel de Juárez el que acumuló una mayor influencia en el estado, tras su ruptura con el Cártel de Sinaloa y los cambios que han existido dentro de su propia estructura, son ahora otros actores criminales los que buscan apropiarse de las principales plazas y corredores fronterizos.
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Si bien existen algunos locales como La Línea -cuyo origen se remonta a ser un brazo armado del Cártel de Juárez-, también otros asociados del Cártel de Sinaloa como lo son los Cabrera Sarabia e incluso el Cártel Jalisco Nueva Generación han buscado adentrarse a terreno chihuahuense.
Los Fariseos del Cártel de Sinaloa
Las detonaciones de armas de fuego presagiaron un operativo encabezado por fuerzas federales el pasado 2 de diciembre que culminó con la detención de once generadores de violencia en la localidad de El Pueblito en el municipio de Aldama.
A través de un comunicado, el Gabinete de Seguridad informó que la diligencia fue encabezada por elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Defensa), la Guardia Nacional (GN), la Secretaría de Marina (Semar), la Fiscalía General de la República (FGR) y la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC).
Además del aseguramiento de once armas largas, dos ametralladoras, dos fusiles Barret, tres vehículos, artefactos explosivos y un dron, las autoridades confirmaron que las personas detenidas estaban relacionadas con grupo delictivo que opera en la región: Los Fariseos. Aunque dicho nombre no es de los más famosos dentro del hampa mexicano, su líder -quien también fue detenido- es identificado como un muy cercano colaborador a los Cabrera Sarabia, un clan familiar que lleva décadas trabajando con el Cártel de Sinaloa, específicamente con la facción afín a Ismael El Mayo Zambada.
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"Roberto 'N' alias, El 02, forma parte de una célula delictiva, es considerado como uno de los principales generadores de violencia en los municipios de Aldama, Coyame del Sotol y Manuel Benavides en el estado de Chihuahua", precisó el comunicado del Gabinete de Seguridad.
Con el arresto de El 02, autoridades confirmaron la presencia que los representantes de los Cabrera Sarbia tienen en el noreste del estado, no obstante, no ha sido el único episodio que ha exhibido su intención por controlar los municipios que componen el corredor que los acerca a la frontera con Estados Unidos.
A finales del mes de julio, autoridades estatales y federales capturaron en el municipio de Ojinaga a seis personas, entre las que se encontraba Gerardo González Hernández alias El 03, hermano del recién detenido Roberto "N".
De acuerdo con reportes de medios de comunicación locales, además de ser vinculados con los Cabrera Sarabia, el arresto de las seis personas se llevó a cabo como parte de las investigaciones que se seguían para esclarecer el homicidio de Alan Valenzuela, un joven norteamericano que fue atacado a balazos junto con sus amigos luego de salir de un bar del mismo municipio.
En seguimiento a las pesquisas, agentes de la Fiscalía General del Estado (FGE) llevaron a cabo una serie de cateos que finalmente culminaron con el arresto de El 03 y sus subordinados, a quienes se les aseguraron armas de fuego, drogas y al menos tres vehículos.
Lo que en un inicio parecía un episodio más de violencia en el estado terminó por revelar los intentos de expansión de los Cabrera Sarabia en la zona, mismos que alcanzaron un punto álgido desde septiembre de 2024 gracias a una traición.
La fractura de La Línea
La mañana del 20 de septiembre de 2024 Ojinaga despertó con una tétrica escena. Once cuerpos, dos de ellos decapitados, fueron abandonados en un predio cercano a las instalaciones de la Comisión Federal de Electricidad del municipio, de acuerdo con reportes de Norma Ponce para MILENIO.
Aquel escenario no sólo se convirtió en una expresión más de la violencia que se incrementó tanto en Ojinaga como en Coyame del Sotol y Manuel Benavides sino que también exhibió lo que se temía: una fractura dentro de La Línea.
El que un día fue considerado como uno de los brazos armados con los que el Cártel de Juárez combatiría al Cártel de Sinaloa ahora se enfrentaba a una división interna cuya génesis, según el reporte de la Fiscalía General del Estado (FGE), se debía a una traición.
"Hoy se encontraron once cuerpos y un mensaje que refería que eso ocurriría con quienes hayan traicionado al grupo, haciendo referencia a una persona denominada como El 04. Los cuerpos de las víctimas presentaban signos de tortura", señaló el fiscal César Jáuregui Moreno.
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La información de los agentes estatales ubicaron que dicho alias correspondía a Roberto "N", quien habría reunido a un grupo de pistoleros de un grupo criminal de Durango: los Cabrera Sarabia. ¿El objetivo? Tomar el control de Ojinaga, cuya posición es estratégica para las actividades del crimen organizado.
Desde 2011 la Secretaría de la Defensa Nacional (Defensa) tenía conocimiento de que los Cabrera Sarabia concentraban parte de sus actividades criminales en Durango pero también en el sur de Chihuahua. Dicho detalle fue expuesto en el mismo comunicado en el que se informó el arresto de su líder y fundador, Felipe Cabrera Sarabia alias El Ingeniero o Rey de la Heroína.
Aunque desde entonces el grupo criminal originario de Durango ya tenía presencia en Chihuahua, con el paso de los años y a través de aliados como El 03 lograron avanzar posiciones hacia municipios del norte como es el caso de Aldama, Coyame del Sotol y Manuel Benavides hasta llegar a Ojinaga.
Dicho avance dejó a su paso múltiples episodios violentos como enfrentamientos o el hallazgo de cuerpos. Reportes de aseguramientos y arrestos de agosto de 2025 apuntan a sus protagonistas como miembros de La Línea o de los Cabrera Sarabia.
Por ejemplo, tras el arresto de once personas el lunes 8 de agosto en Ojinaga, la FGE y la Policía Estatal identificaron a cuatro miembros de La Línea involucrados en delitos como secuestro, extorsión y posesión de armas de fuego.
En ese mismo mes, un enfrentamiento entre ambas organizaciones delictivas dejó como saldo dos muertos y un bloqueo en la carretera federal que conecta ciudad Camargo con Ojinaga.
Pese a los intentos de los Cabrera Sarabia de expandirse por territorio chihuahuense, lo cierto es que en el estado existe una proliferación de células criminales que también buscan el control de plazas y corredores estratégicos y que, en el afán de cumplir sus objetivos, desatan olas de violencia.
Un pequeño vistazo al panorama criminal de Chihuahua
La violencia que desataron el Cártel de Sinaloa y el Cártel de Juárez entre 2008 y 2011 en Chihuahua fue el punto de partida para que surgieran diversos grupos criminales de los cuales algunos se decantaron por alguna de las dos organizaciones criminales en pugna.
Del lado de los sinaloenses se ubicaron brazos armados como Gente Nueva, Los Mexicles, los Artistas Asesinos y los Cabrera Sarabia e, incluso Los Salazar. En contraparte, el Cártel de Juárez conformó a La Línea, cuyo poderío incluso los llevó a ser considerados como un cártel por derecho propio en el estado.
"Grupos como La Línea emergieron como los grupos criminales más dominantes de México al subcontratar la seguridad y el control territorial a redes más localizadas", describe InSight Crime sobre el grupo criminal.
Pese a dicho poderío, fue en 2024 cuando La Línea comenzó a presentar divisiones internas, mismas de donde han surgido no sólo redes criminales como la de El 04 que se aliaron con los Cabrera Sarabia sino también otras células como La Empresa y el Nuevo Cártel de Juárez, este último en contubernio con el Cártel Jalisco Nueva Generación.
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Investigaciones de autoridades estadounidenses refieren que el acercamiento entre disidentes de La Línea y el también llamado cártel de las cuatro letras se remonta a septiembre de 2023 cuando acordaron que el CJNG sería su fuente de suministro de cocaína, metanfetamina y fentanilo.
La dinámica criminal de Chihuahua exhibe el latente interés que tienen cárteles y brazos armados por operar sus plazas y corredores fronterizos a través del único camino que han recorrido durante décadas: la violencia.
ATJ
