Una juez con sede en Chalco determinó vincular a proceso a José Ignacio 'N' por su probable participación en el feminicidio de Itzel González, la joven originaria de Ozumba que fue hallada sin vida dentro de una cisterna en el municipio de Tepetlixpa.
Durante la audiencia realizada en los juzgados de control del Centro Penitenciario y de Reinserción Social de Huitzilzingo, en Chalco, se desahogaron las pruebas para acreditar la participación del señalado, quien era amigo de la víctima.

Presentan resultados de pruebas periciales
Además, se presentaron los resultados de las pruebas periciales que ordenó la autoridad judicial con especialistas en psiquiatría a petición de la defensa José Ignacio, quienes argumentaron que el sellado padecía un trastorno mental.
El abogado Roberto Aguilar Estrada, defensor de la familia de Itzel, explicó que el peritaje demostró que José no es inimputable, por lo que seguirá su proceso conforme a la ley.
“Dos dictámenes por parte de peritos de la fiscalía especializados en psiquiatría, los cuales arrojaron que la persona es apta para poder llevar un procedimiento que no está mal de sus facultades mentales qué no tiene ninguna enfermedad que lo pudiera considerar como persona inimputable", dijo
La juez dictó tres meses para el cierre de la investigación y será a principios de 2026 cuando se realice el desahogo del resto de las pruebas.
“Un trabajo bueno coordinado para que esto tenga un buen término para Itzel y su familia que obtengan justicia estaremos pendientes para aportar todas las pruebas necesarias para lograr una condena justa para esta persona”
Las investigaciones de la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM) apuntan a que, la víctima de 22 años sufrió golpes y abuso sexual por parte del imputado, previo a ser ultimada.
Después José la habría estrangulado y para deshacerse del cuerpo, le roció gasolina y le prendió fuego, lo que le ocasionó heridas en el 80 por ciento de su cuerpo y la lanzó a la cisterna.
Itzel salió a cenar y ya no regresó
El martes 7 de octubre, la joven pidió permiso a sus padres para salir a cenar con un amigo, por lo que sus familiares accedieron.
Su madre explicó que, en cada salida, Itzel le mandaba su ubicación en tiempo real para no generar preocupaciones y por lo menos cada media hora le mandaba mensajes para decirle que estaba bien, sin embargo, ese día no lo hizo.
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