Washington anunció el aseguramiento histórico de 300 toneladas de precursores químicos que, asegura el Departamento de Justicia, tenían como destino laboratorios del Cártel de Sinaloa en México para la producción de metanfetamina.
En una conferencia de prensa en Houston, Texas, encabezada por la fiscal para el Distrito de Columbia, Jeanine Ferris Pirro, se detalló que en total se realizó la interdicción de dos cargamentos con un total de 309 mil barriles, con dos tipos diferentes de precursores químicos.
“Hablo de 363 mil libras de alcohol bencílico y 334 libras de N metilformamida. Hubieran sido usados para producir 420 mil libras de metanfetamina la cual hubiera tenido un valor en la calle aquí en Houston de 569 millones de dólares”, explicó la procuradora.
De acuerdo con la fiscal estadunidense, los cargamentos salieron desde Shangai, China, y tenían como destino costas de México, en lo que la funcionaria describió como una guerra no declarada de China al gobierno de Estados Unidos y a sus ciudadanos.
El caso fue investigado previamente por la oficina de Investigaciones de Seguridad Nacional (HSI), la oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) y la jefatura del Departamento de Justicia en Washington, lo que permitió determinar a través de inteligencia que los laboratorios a donde se dirigían los químicos están en la zona de operación del Cártel de Sinaloa, un cártel con la capacidad, según la fiscal, de hacer una tonelada de metanfetamina a la semana.
La fiscal Ferris además explicó que la designación del Cártel de Sinaloa como una Organización Terrorista Extranjera (FTO), permitió a las autoridades estadunidenses realizar el seguimiento y aseguramiento del cargamento, pero también, dará pie a que Washington pueda buscar asegurar bienes vinculados al cártel en suelo norteamericano e incluso fuera de él.
SNGZ