Cuando el lunes 21 de febrero los primeros trabajadores llegaron a la Escuela Primaria Adolfo López Mateos, en la ciudad de Colima, encontraron una cartulina que encendió las alarmas: “Mañana martes 21 de febrero vamos a hacer una puta limpia en esta escuela”.
La institución se ubica en El Zalatón, uno de los barrios más azotados por la violencia en la capital del estado y nicho del Cártel Independiente de Colima. “Personal docente y administrativo tiene miedo”, dijo luego en entrevista el líder de la Sección 6 del SNTE, José Jaime Núñez.
A través de un comunicado, los directivos de la Primaria confirmaron el hallazgo de un “mensaje amenazante” y determinaron como primera medida la suspensión de actividades presenciales en el plantel para ese día y el siguiente (el día de la amenaza) además informaron que solicitaron a las dependencias de seguridad municipal y estatal patrullaje durante la jornada escolar.
Pero después, la Secretaría de Educación y Cultura del Gobierno del Estado determinó la ampliación de la suspensión de labores presenciales en el plantel los días 22 y 23 de febrero y como el viernes 24 de febrero se programó la sesión del Consejo Técnico Escolar, tampoco hubo clases ese día.
Pero éste no es ni el primero ni el único hecho en que el crimen organizado ha utilizado las escuelas primarias en Colima como lienzos para publicar mantas o cartulinas con mensajes amenazantes, especialmente desde que la crisis de inseguridad creció en la entidad, el año pasado.
Por mencionar algunas, en diciembre de 2022 fue localizada una manta con mensaje amenazante, afuera de una escuela primaria en la Colonia Emiliano Zapata del municipio de Villa de Álvarez; y una cartulina afuera de la escuela Tipo República Argentina en pleno centro de Colima.
O cuando apareció una narcomanta con mensajes amenazantes, sobre la calle Flor de Azaleana, a las afueras de la escuela primaria Francisco Palacios en la Colonia Arboledas del Carmen del municipio de Villa de Álvarez.
Aunque la Secretaría de Educación y Cultura dijo no tener estadísticas de estos hechos, recuentos hemerográficos dan cuenta de varias decenas de casos en los últimos 14 meses. En todos los hechos, tras el reporte acudieron las corporaciones policiacas para retirar las mantas o cartulinas y entregarlas al agente del Ministerio Público.
Ante el clima de inseguridad, en septiembre de 2022 la Secretaria, a través de la Dirección de Desarrollo de la Gestión Educativa, creó la Unidad de Reacción Inmediata de Seguridad Escolar (URISE), con el objetivo de “brindar apoyo ante riesgos latentes de carácter natural o antrópicas que vulneren la seguridad de la comunidad escolar y así se contribuya al sano desarrollo de las niñas, niños y adolescentes dentro del plantel escolar”.
En una ficha informativa entregada a MILENIO, detallaron que “se continúa con platicas, talleres, asesoría y orientación inmediata a jefes de sector, supervisores, directores, docentes y a la comunidad escolar con el fin de saber cómo actuar ante una emergencia de cualquier tipo que signifique riesgo para todos alumnos de educación básica”.
HCM