Antes de que Jorge Humberto Figueroa Benítez, más conocido como La Perris o El 27, fuera abatido por elementos del Ejército mexicano, el nombre del jefe de seguridad de Los Chapitos había resonado luego de que supuestamente le proporcionara información a las autoridades para detener a cuatro miembros de alto rango de la organización que comandan los hijos de Joaquín El Chapo Guzmán.
La Perris fue abatido el viernes 23 de mayo en Culiacán, sin que sus sicarios acudieran a rescatarlo, a pesar de haber pedido ayuda por frecuencia de radio. Aquí te decimos a qué capos entregó Humberto Figueroa.

El Jando: El piloto de confianza
El 8 de febrero se realizó un operativo al norte de Culiacán que dejó a un militar muerto a cambio de la detención de un importante integrante de Los Chapitos identificado como Mauro Alberto Núñez Ojeda, El Jando, el piloto de confianza de Iván Archivaldo y una de las piezas claves para esclarecer qué pasó el jueves 25 de julio del 2024.
El Jando era uno de los mayores hombres de confianza de Iván Archivaldo. Se encargaba en gran medida del tráfico de droga nacional e internacional por los aires. Cuando tenía 20 años se unió al Cártel de Sinaloa de la mano de un jefe criminal llamado El 300, quien le enseñó a pilotar para llevar los cargamentos de Sinaloa a Chiapas.
Una investigación de Óscar Balderas para MILENIO reveló que, el también apodado Jandito, Janito o Jano, era un joven que soñaba con conducir vehículos Fórmula 1, pero terminó desarrollando sus habilidades en otra carrera, la criminal. Donde probó especial valía en el cielo, más que en la tierra. Volaba bajo, maniobraba con carga pesada y era temerario en aterrizajes complejos.
Entre 2015 y 2018, El Jando —aseguran— llegó a aterrizar hasta 600 kilos de cocaína y media tonelada de armas; sin embargo, la tarea más importante que le encomendaron Los Chapitos fue supervisar la entrega de El Mayo Zambada a Estados Unidos.
En Sinaloa corre el rumor de que El Jando participó en la entrega del cofundador del Cártel de Sinaloa. Y que su papel no fue menor. Se presume que conocía cada punto de la supuesta negociación entre Los Chapitos y la Administración para el Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés).
“No hay claridad todavía si El Jando fue el piloto que llevó a El Mayo a Estados Unidos. O si fue el que diseñó el plan de vuelo para un piloto estadunidense. Lo único que sí está claro es que fue un componente clave en esta historia y que sabe los secretos que el gobierno mexicano ha querido conocer desde el año pasado y que no suelta Estados Unidos”, señala la investigación.
Con esto, El Jando pasó de ser una pieza importante a una indispensable dentro de Los Chapitos; sin embargo, poco le duró el gusto, pues meses después fue capturado, presuntamente gracias a información de La Perris, con quien el piloto, se dice, participó en Los Culiacanazos de 2019 y 2023.

José Ángel Canobbio Inzunza: La mente maestra
Durante la tarde del miércoles 19 de febrero, se reportó la detención de José Ángel "N", El Güerito, quien supuestamente era el responsable de las finanzas de Los Chapitos.
José Ángel "N" también es uno de los integrantes de la familia Canobbio Inzunza, brazo armado del Cártel de Sinaloa que tomó relevancia tras la captura de El Chapo Guzmán.
Para hablar de José Ángel "N" hay que remontarse al 2016, cuando, después de la captura de El Chapo Guzmán, Iván Archivaldo creó un brazo armado que operaba principalmente en la capital sinaloense. Grupo identificado como Los Güeritos o Los Brontos.
Ésta célula criminal estaba encabezada por Alejandro, Jorge Abraham y José Ángel "N", los hermanos Canobbio Inzunza.
Con el paso de los años, se dice que José Ángel Cannobio Inzunza se convirtió en el cerebro operativo de Los Chapitos, característica que incluso lo llevó a ser considerado —por periodistas especializados en el narcotráfico— como el posible sucesor de Iván Archivaldo Guzmán Salazar en caso de una captura.
Tras su captura, se reveló que José Ángel "N", de 44 años de edad, es identificado en Estados Unidos como un integrante de alto perfil dentro de esa facción del Cártel de Sinaloa, relacionado con la producción y distribución de narcóticos como la cocaína, fentanilo, metanfetamina y mariguana.
El año pasado, la periodista de investigación Anabel Hernández reveló que la influencia de los hermanos Canobbio Inzunza les ha permitido ser la mente criminal detrás de Los Chapitos; además de controlar rutas por las que se trafica fentanilo.

El 200: Guardaespaldas de Iván Archivaldo
Otro de los capos supuestamente traicionados por La Perris fue Kevin Alonso 'N', El 200, quien presuntamente fungía como jefe de seguridad de Iván Archivaldo Guzmán.
De acuerdo con fuentes de seguridad, la detención ocurrió durante la noche del 19 de febrero, en la sindicatura de Culiacancito, donde personal militar implementó un fuerte despliegue para ubicarlo.
Omar García Harfuch, secretario de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), indicó que Kevin Alonso 'N', de 34 años, era responsable coordinaba la compra de armas y municiones para la fracción de Los Chapitos.
"El 200 era responsable de la seguridad del líder de esta organización criminal (...). Se le relaciona con homicidios, extorsiones y ataques a la autoridad así como generar violencia en la entidad", escribió el funcionario en X.
También imponía castigos a miembros de la organización, así como medidas de contrainteligencia para asegurar la protección de sus áreas de influencia y el resguardo de Iván Archivaldo Guzmán Salazar.
Se le investiga por varios homicidios y extorsiones. Tenía nexos con la Policía Municipal de Culiacán, cuyos elementos le informaban de operativos federales.
Kevin Alonso 'N' habría sido encargado de organizar hombres para confrontaciones bélicas contra grupos rivales; motivo por el cual, en 2014, fue arrestado en la colonia Burócrata junto a su hermano, El 300, quien fue el mentor de El Jando.
Cabe mencionar que la detención de El 200 ocurrió durante los operativos que se implementaron en Culiacán, horas después de la captura de Canobbio Inzunza.

El Toner: El elegido para acabar con La Perris
Luego de que supuestamente Humberto Figueroa Benítez proporcionara información a las autoridades para detener a los mencionados narcotraficantes; Iván Archivaldo encomendó a otro de sus jefes de seguridad, Luis Alfonso López Reatiga, El Toner o El Bellaco, para acabar con La Perris.
Sin embargo, de acuerdo con información que fuentes de inteligencia federal revelaron a MILENIO, La Perris solicitó apoyo a Ismael Zambada Sicairos, El Mayito Flaco, para neutralizar a El Toner ante la posibilidad de que él fuera el medio a través del cual Iván Archivaldo buscara saldar cuentas.
El informe refiere que La Perris y El Mayito Flaco infiltraron a un colaborador al círculo más cercano de El Toner, quien, la tarde del 25 de febrero, le disparó al miembro de Los Chapitos.
El Torner resultó herido, por lo cual fue trasladado de urgencia al Hospital Médica de Culiacán. Posteriormente, se dice que La Perris fue el encargado de filtrar su ubicación a las autoridades federales para que lo detuvieran a él y su escolta personal.
Se sabe que Luis Alfonso López Reatiga asumió el liderazgo de los pistoleros de la facción que lidera Iván Archivaldo Guzmán, luego de que el 6 de enero fuera abatido en un enfrentamiento Juan Luis Castro Morales, El Gavilán.
El Toner solía estar resguardado por varios sicarios, además de que procuraba mantener un perfil bajo moviéndose en vehículos compactos por diferentes domicilios de la capital sinaloense.

Información de MILENIO revela que La Perris filtró información que derivó en la detención de estos tres narcotraficantes cercanos a Los Chapidos, además de:
- Rogelio Reynoso, encargado del manejo de explosivos.
- Horacio Félix Loaiza, responsable de la nómina de los sicarios.
- Juan Manuel Bernal Hernández, jefe de pistoleros en Escuinapa.
- Hernán Domingo Ojeda, tío de Ovidio Guzmán.

RM